El Banco Mundial advierte que la pobreza acabar¨¢ estallando como "una bomba de relojer¨ªa"

ENVIADA ESPECIALEl presidente del Banco Mundial ofreci¨® ayer el rostro humano de la econom¨ªa en una asamblea dominada por proclamas a favor de la liberalizaci¨®n. James Wolfensohn reconoci¨® las bondades del libre flujo de capitales ,pero advirti¨® a los asistentes a las reuniones de Hong Kong que si no se incorpora a los p¨¢ises menos desarrollados a la prosperidad que gozan las econom¨ªas avanzadas se corre el peligro de que los efectos de la desigualdad y la pobreza exploten "como una bomba de relojer¨ªa" y lo hagan "en la cara de las pr¨®ximas generaciones".

"Si no actuamos ahora, las desigualdades ser¨¢n gigantescas en los pr¨®ximos a?os", asegur¨® el presidente del Banco Mundial en su discurso de apertura de la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, que se celebra en Hong Kong. La ceremonia inaugural fue presidida por el primer ministro chino, Li Peng. "Con una poblaci¨®n mundial que crece al ritmo de 80 millones al a?o, en lugar de tener 3.000 millones de personas que viven con menos de dos d¨®lares al d¨ªa (en el umbral de la pobreza), en 30 a?os habr¨¢ 5.000 millones", prosigui¨® Wolfensohn.A?adi¨® que dada la inexistencia de pol¨ªticas para frenar el deterioro del medio ambiente, ¨¦ste empeorar¨¢ de forma preocupante. "Frente al 4% de la selva amaz¨®nica ahora arrasada, habr¨¢ un 24%". Se?al¨® tambi¨¦n que el n¨²mero de conflictos b¨¦licos -que s¨®lo en 1996 ascendi¨® a 26 con 23 millones de refugiados- se disparar¨¢ como resultado de la falta de apoyo internacional a las zonas afectadas, como se ha visto en la tardanza de la ayuda a Bosnia, Palestina o los grandes lagos en ?frica. "Sin igualdad ser¨¢ imposible tener estabilidad en el mundo".

Wolfensohn ret¨® a las agencias de desarrollo a cooperar con el Banco Mundial para estrechar el abismo que separa a los pobres y ricos del planeta. "Nuestro objetivo debe ser la reducci¨®n de estas disparidades entre pa¨ªses y, dentro de los pa¨ªses, lograr integrar a m¨¢s y m¨¢s gente en el bienestar econ¨®mico que gozan algunos y promover la igualdad de oportunidades para acceder al desarrollo, sin que se tengan en cuenta nacionalidad, raza o sexo".

El Banco Mundial, que desde la llegada de Wolfensohn ha descentralizado sus actividades y dado un serio impulso a programas como el de la condonaci¨®n de la deuda de los pa¨ªses pobres, se?al¨® qu¨¦ la comunidad internacional tiene una oportunidad delicada para distinguir entre hacer dinero como siempre o contribuir a crear algo m¨¢s. "En el Banco Mundial estamos preparados para asumir este reto, pero no lo podemos hacer solos".

En ese mismo foro, el director gerente del FMI, Michel Camdessus, se encarg¨® de aplacar los temores de los pa¨ªses en desarrollo sobre el nuevo papel que va a jugar esta instituci¨®n en el fomento de la liberalizaci¨®n de capitales. Fruto de la crisis a¨²n presente en los mercados del Sureste Asi¨¢tico, la iniciativa de dar m¨¢s poderes al FMI para forzar la liberalizaci¨®n de capitales en cualquiera de los pa¨ªses miembros ha despertado fuertes recelos en las econom¨ªas que a¨²n recurren a mecanismos de control de cambios para dosificar su apertura a los mercados de capitales internacionales.

Movimientos de capital

En su discurso, Camdessus dej¨® claro que el objetivo de esta nueva misi¨®n no es "hacer un sacrifico en nombre de las corrientes liberalizadoras". Asegur¨® que el FMI no pretende forzar a los pa¨ªses a eliminar de forma prematura las restricciones sobre el movimiento de capitales y tampoco obligarles a prescindir de medidas temporales de control de cambios.

"M¨¢s bien, nuestra intenci¨®n", aseguro, es animar a los pa¨ªses a levantar los controles de capitales, de tal manera que se sigan impulsando las pol¨ªticas estabilizadoras que aseguren un sector financiero s¨®lido y consoliden la liberalizaci¨®n econ¨®mica".

Camdessus tambi¨¦n aludi¨® al aumento de los recursos del FMI. Y es que la instituci¨®n ha logrado un aumento de cuotas del 45%, que ha permitido actualizar el peso que han ganado algunos pa¨ªses en la econom¨ªa mundial, como es el caso de Espa?a, aunque m¨¢s modestamente de lo esperado, y una asignaci¨®n de 21.400 millones de derechos especiales de giro (la moneda de reserva del Fondo), unos 4,36 billones de pesetas.