Las 'pinturas negras' de Goya cambian de salas en el Prado
Las pinturas negras que Francisco de Goya (1746-1828) pint¨® en la Quinta del Sordo en 1820, depositadas en el Museo del Prado, cambiaron el pasado fin de semana de lugar para dejar paso a las nuevas salas de escultura cl¨¢sica. Durante el domingo y el lunes se trasladaron de las salas n¨²meros 66 y 67, situadas en la entrada de la puerta Murillo, a los espacios dedicados a las exposiciones temporales y recientemente a almac¨¦n de obras, en la puerta baja de Goya.El cambio de las pinturas, que provoca inseguridad y malestar a los visitantes, se debe a la instalaci¨®n de la escultura cl¨¢sica del museo, que el pasado mes de julio comenz¨® a instalarse en las salas 71, 72, 73 y 74, seg¨²n el plan museogr¨¢fico aprobado por el Patronato del Prado. El pr¨®ximo 30 de octubre se presentar¨¢n las nuevas salas, que estar¨¢n dedicadas a la colecci¨®n de Cristina de Suecia. Est¨¢ previsto seguir con retratos, escultura menor y las adquisiciones de Felipe V.
El nuevo traslado, que respeta el montaje pero con un nuevo color teja en las paredes, ser¨¢ provisional, ya que el plan prev¨¦ montar las pinturas negras en la tercera planta con los espacios liberados en las obras de reforma de las cubiertas que se realizan en la actualidad. Es posible que este aspecto se modifique y en su lugar se instale la colecci¨®n de carteles y que, por su importancia, las pinturas negras sigan el recorrido habitual de sus pinturas.
La ampliaci¨®n del Prado, de acuerdo con el plan museogr¨¢fico, sigue pendiente de incluir el entorno del claustro de la iglesia de los Jer¨®nimos, en donde se piensan situar las salas de exposiciones temporales, el taller de restauraci¨®n y el sal¨®n de actos, as¨ª como la conexi¨®n subterr¨¢nea con el edificio Villanueva y el de Aldeasa, donde se trasladar¨¢n los servicios internos. "Las negociaciones van por muy buen camino", dijo ayer el secretario, de Estado de Cultura, Miguel Angel Cort¨¦s, una frase que se repite en el ¨²ltimo a?o. El optimismo actual se debe, seg¨²n Cort¨¦s, a un reciente encuentro entre el presidente del Gobierno y el arzobispo de Madrid.
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