Pablo Palazuelo se descubre como un "astronomo del arte"

Pablo Palazuelo (Madrid, 1916) es un artista al que no le gusta mirar atr¨¢s. Hay un impulso que lo lleva a, concentrarse s¨®lo en lo que le queda por hacer. Persistente en la investigaci¨®n de su lenguaje art¨ªstico, el de la geometr¨ªa, Palazuelo se siente como un cient¨ªfico capaz de describir el universo por medio de los n¨²meros y los c¨¢lculos, como un astr¨®nomo del arte". La galer¨ªa madrile?a Soledad Lorenzo (Orfila. 5) presenta una muestra de sus ¨²ltimos trabajos hasta el 22 de noviembre.

La retrospectiva que se le dedic¨® en 1995 en el Museo Reina Sofia signific¨®, para muchos, la constataci¨®n de que la obra de Pablo Palazuelo ha seguido una trayectoria no s¨®lo coherente, sino ejemplar, dentro de la historia del arte espa?ol. Para el artista, que no se mostraba particularmente interesado en esa exposici¨®n, ¨¦sta fue s¨®lo un episodio. "No se puede decir que no me importe lo que he hecho antes. Pero lo que me interesa realmente es lo que estoy haciendo y lo que voy a hacer. Lo otro es cosa pasada, no hay nostalgia", afirma. "Para m¨ª no hubo recapitulaci¨®n, ni prop¨®sito de enmienda. Yo he seguido mi l¨ªnea, que da para muchas variantes y posibilidades". Esa mirada hacia adelante proviene, en Palazuelo, de dos fuentes. Por un lado, la profundizaci¨®n en las teor¨ªas que fundamentan su b¨²squeda pl¨¢stica, y, por otro, el deseo, muchas veces insatisfecho, que le deja una obra concluida. "Entre las cosas que me ha ense?ado m¨ª trabajo, que han sido muchas, est¨¢ esa del deseo. Del deseo del mundo. Del deseo de todo. Yo noto, cuando estoy haciendo las formas, las ganas que tengo YO, y la propia forma que est¨¢ surgiendo, de ir hacia otra forma m¨¢s all¨¢".

Palazuelo se ha concentrado en la investigaci¨®n de su lenguaje art¨ªstico, como un cient¨ªfico puede dedicar d¨¦cadas a observar un microorganismo. "Es muy parecido", admite. "Estos dibujos geom¨¦tricos, que son bastante complejos, son como g¨¦rmenes. Alrededor de ellos se desarrollan formas, como si fuera un cultivo de c¨¦lulas en un laboratorio. Es un c¨®digo geom¨¦trico que puede ser le¨ªdo por la mente humana -no s¨®lo la m¨ªa- si sabe que existe. La prueba es que los matem¨¢ticos descubren el universo con n¨²meros. Los matem¨¢ticos, los fisicos, los astr¨®nomos, los cosm¨®logos, y ahora el arte", afirma. "En cierta forma soy como un astr¨®nomo del arte".

Entre las piezas nuevas que incluye en esta exposici¨®n hay varias esculturas, tituladas Maquetas para paisajes, que representan un proyecto novedoso. Son proyectos pensados para ser realizados a gran escala. "Est¨¢n proyectadas como instalaciones, que podr¨ªan estar en espacios abiertos, en una plaza, en un jard¨ªn o¨ª en un local cerrado. Me interesa este tipo de desarrollo en el espacio, s¨®lo que hasta ahora no ha tenido ofertas ni medios para realizarlo en grande. Por eso propongo estas esculturas como ideas", dice.

"Son una especie de laberintos, pensados para que las personas transiten por ah¨ª. Algunos de los caminos tienen s¨®lo rendijas que permiten ver lugares inaccesibles".