Sainz dice adi¨®s por culpa del coche

Carlos Sainz tampoco volver¨¢ a ser campe¨®n del mundo este a?o. Una aver¨ªa en el motor de su Ford al inicio de la etapa final del Rally de Australia le despidi¨® de la carrera y de cualquier opci¨®n de alcanzar su tercer t¨ªtulo. Unicamente el escoc¨¦s Colin McRae (Subaru), tras su triunfo de ayer, puede impedir la coronaci¨®n de Tommi Makinen (Mitsubishi) en el RAC Rally, ¨²ltima prueba del curso. El finland¨¦s necesita un punto para conquistar su segundo Mundial.El campeonato apurar¨¢ su extensi¨®n para conocer el desenlace. La decisi¨®n vuelve a quedar aplazada hasta Inglaterra, pero Sainz no estar¨¢ esta vez entre los protagonistas del ¨²ltimo acto. El piloto madrile?o perdi¨® su opci¨®n de luchar por el t¨ªtulo en un bosque australiano, cuando se par¨® el motor de su auto. All¨ª se enterr¨® la esperanza de Sainz de compartir cartel con Makinen y McRae hasta el final.

"Se acaba una temporada con m¨¢s disgustos que alegr¨ªas", reconoci¨® Sainz. "No hemos cometido ni un error, pero estamos fuera de la lucha, aunque ya llevamos varios a?os acostumbrados a la mala suerte". Su ilusi¨®n se quebr¨® enseguida. Dur¨® 11 kil¨®metros, lo que tard¨® en claudicar la correa de distribuci¨®n del Escort. El bicampe¨®n espa?ol part¨ªa en posici¨®n de ensue?o. Encabezaba una carrera que a¨²n esquiva su curr¨ªculo, delante de McRae y con Makinen alejado.

Pero el Ford volvi¨® a dejar a su propietario en la cuneta. "Siempre es un fastidio abandonar por aver¨ªa", explic¨®, "y m¨¢s si significa perder la opci¨®n de t¨ªtulo y cuando eres l¨ªder de un rally". A partir de ah¨ª, McRae y Makinen lucharon solos por la victoria y se convirtieron en actores ¨²nicos del desenlace del Mundial, aunque el fin¨¦s cuenta con ventaja. Su segundo lugar de ayer s¨®lo da una remota esperanza a McRae: para ser campe¨®n, el escoc¨¦s debe ganar el RAC Rally y que Makinen no punt¨²e.

Al piloto de Mitsubishi le basta con acabar entre los seis primeros en la ¨²ltima carrera. Y eso si su rival logra el triunfo. Cualquier cosa que no sea la victoria de McRae en su casa, del 23 al 25 de este mes, transportar¨¢ el Mundial nuevamente a Finlandia, igual que el a?o pasado.

La candidatura del n¨²mero uno brit¨¢nico conserva al menos alguna vida. Sainz no puede decir lo mismo. Las matem¨¢ticas le dejan sin opci¨®n: en el Mundial est¨¢ ya a 15 puntos de Makinen y s¨®lo restan 10 por distribuir. Correr¨¢ en Inglaterra para cerrar dignamente su etapa en Ford, antes de emprender la ¨²ltima fase de su carrera deportiva al volante de un Toyota. Carlos ¨²nicamente ha logrado ser campe¨®n del mundo, en 1990 y 1992, con la marca japonesa.

McRae, de 29 a?os, campe¨®n del mundo en 1995, logr¨® en Australia su cuarto triunfo del a?o -los mismos que Makinen- y el 11? de su historial. Una vez librado de la presi¨®n de Sainz, no tuvo m¨¢s que controlar para rubricar su ¨¦xito con seis segundos de ventaja sobre Makinen. Este no lleg¨® a apuntar a la cabeza a pesar de su remonte -de quinto a segundo- y de ser el m¨¢s r¨¢pido en los cuatro tramos. de la ¨²ltima etapa. Pero los seis puntos sumados ayer hacen que el Mundial dependa exclusivamente de ¨¦l.

El campeonato de pilotos es el ¨²nico por decidir. En Australia se cerr¨® el de marcas: gracias al triunfo de McRae, Subaru renueva su t¨ªtulo. En el grupo N se coron¨® hace semanas el uruguayo Gustavo Trelles, y en la categor¨ªa de dos litros el t¨ªtulo ya era de Seat, que aun as¨ª ofreci¨® en Australia otra exhibici¨®n. Harri Rovaripera se adjudic¨® el triunfo en la categor¨ªa -s¨¦ptimo consecutivo para Seat este a?o- y Oriol G¨®mez acab¨® tercero.