Tocado y hundido

Crisis de libro. Por encima de otras consideraciones, el partido, si se le puede denominar as¨ª (no hubo igualdad, emoci¨®n, incertidumbre), fue toda una lecci¨®n pr¨¢ctica, en ocasiones magistral, de lo que se entiende por un equipo en crisis total. A d¨ªa de hoy, el Barcelona re¨²ne todas las situaciones y circunstancias necesarias para entender c¨®mo un equipo que hace cuatro meses era campe¨®n de la Liga por tercera vez consecutiva se haya convertido en la caricatura que intent¨® sin ¨¦xito (no pod¨ªa ser de otra forma) rematar un fin de semana que se inici¨® glorioso para el barcelonismo.Irreconocible Barcelona. Baja forma individual y colectiva, fichajes de dudosa eficacia hasta el momento, lesiones varias y unos cuantos malos resultados han conformado un conjunto irreconocible, nervioso hasta la crispaci¨®n, inseguro como un debutante en la alta competici¨®n, incapaz de superar ni por un momento su mayor enemigo, ellos mismos. La vuelta de Due?as es esperada como la del salvador, pero viendo el desaguisado actual no se arregla con un jugador todav¨ªa en formaci¨®n.

Un buen Madrid. El Madrid hizo lo conveniente ante un rival tocado del ala. No darle opci¨®n, sacar ventaja desde el inicio, ahondar cuanto antes en los problemas ajenos. Los blancos fueron inclementes desde el salto inicial y no dieron muestras de debilidad en ning¨²n momento. Ni siquiera cuando Djordjevic llev¨® el encuentro al terreno de la bronca en un desesperado intento de hacer reaccionar a su equipo. Un intento in¨²til y en el que a Djordjevic, de tanto tensar la cuerda, finalmente se le fue la mano y acab¨® expulsado por el ¨¢rbitro.

Buenos y malos. Cuando Mij¨¢ilov tiene su d¨ªa y est¨¢ en onda como ayer (con Miguel ?ngel Mart¨ªn en el banquillo parece m¨¢s centrado), el Madrid adquiere una solidez destacable. Bodiroga es un talento, aunque siga sin apuntalar la ¨²nica laguna en su juego, el tirar a canasta con mayor rapidez. En el Palau no la necesit¨® y su incidencia en el juego fue constante y siempre positiva. Del Bar?a, s¨®lo malas noticias. Nicola anda perdido, casi tanto como Rentzias. Mustaf s¨®lo rinde a duras penas en ataque, y Djordjevic, con o sin careta, se halla fuera de punto. Cogieron el primer rebote ofensivo en la segunda parte y fallaron en ataque y defensa. Un panorama poco edificante y con dif¨ªcil soluci¨®n a corto plazo.