El estilillo soez
La palabra "estilo" fue una gran usurpaci¨®n de la derecha espa?ola, principalmente de la rama falangista (la m¨¢s literaria, la que mejor escrib¨ªa), durante y despu¨¦s de la guerra civil. Estilo de vida, quer¨ªan decir. Como un arma de guerra: los otros, los rojos, no ten¨ªan estilo, y no eran los hijos de Garcilaso, ni de los romanos ni de las walkirias. Era tal su odio a lo soez, a lo vulgar, de lo que acusaban al rojo o villano, que se volvieron soeces para zaherirlo mejor. Veo, con pesar, que siguen en el estilo. Lo de "no tiene nada que mostrar m¨¢s que el escote" de Manuel Fraga a una diputada socialista es simplemente una groser¨ªa. Le quieren empapelar por machismo: qu¨¦ tonter¨ªa. Eso pertenece al terreno de lo "pol¨ªticamente correcto". No me sorprendi¨®: era, simplemente, una cosa soez, como son ellos: como ha sido tantos a?os Abc. Con nosotros, quiero decir. Cuando ahora le defienden otros del estilillo, recuerdo que era una cuesti¨®n de car¨¢cter.Otro de esos tipos dice que devuelvan los socialistas lo que se llevaron" (por la Expo). Cuarenta a?os han estado acusando a los rojos de hab¨¦rselo llevado todo y pidiendo que lo devuelvan. Ahora que no hay rojos, toman por ellos a los socialistas. (No hay comunistas, y son anticomunistas del pasado; se quieren cargar a los que no "cantaron la gallina", vieja expresi¨®n de nuestro fabulario: met¨¢fora del cacareo de gallina que hace el gallo de pelea cuando se siente vencido).
El que es due?o del pasado es due?o del futuro, dec¨ªa Orwell: me lo recuerda Guido Bruner hablando de otra cosa. Los due?os del pasado se est¨¢n comiendo el presente y lo est¨¢n deteriorando con su lenguaje despectivo y duro. Claro que los rojos se llevaron de todo, y los socialistas tambi¨¦n: todo era de la gran derecha, y Espa?a era, como se ha dicho mucho, su finca; todo aquello de lo que los socialistas dispusieron como gobierno era un robo: un robo a su clase.
Cada d¨ªa est¨¢ m¨¢s claro el regreso de las clases sociales: lo ha puesto de moda el liberalismo de mercado, el capitalismo convertido en neocapitalismo (el paso del final del proteccionismo de Estado en favor de la empresa al nuevo intervencionismo en favor de las empresas: nacionalizaciones concedidas a los suyos, neutralizaci¨®n y ataque a las empresas adversas a las suyas. No hacen m¨¢s que recuperar como si fuese suyo, por derecho de la Reconquista, lo que otros ganaron).
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