Red de firmas
Somos Iglesia naci¨® hace dos a?os en Austria y Alemania. R¨¢pidamente se extendi¨® por Reino Unido, Holanda, Francia, Italia y Portugal, y lleg¨® a Estados Unidos y Brasil. En todos sitios, se apoya ideol¨®gicamente en el Concilio Vaticano II y, en lo pr¨¢ctico, en una masiva recogida de firmas -"un referendum", lo llaman- con el objetivo de construir una "red de Iglesia en libertad o en cambio".
Los propios organizadores austriacos contaban con recoger en principio unos cuantos miles de firmas. Pero para su sorpresa se encontraron con que en tres semanas ten¨ªan ya medio mill¨®n. En consecuencia, se sintieron fuertes para enviar a los obispos una carta sobre sexualidad y lanzar una campa?a por la democratizaci¨®n y la colegialidad en la Iglesia.
En Alemania, en el oto?o de 1995, en dos meses consiguieron 1,8 millones de firmas. Los obispos accedieron a recibirles. Un argumento eficaz para sumar apoyos fue poner de relieve la contradicci¨®n de que los cat¨®licos alemanes deben dar dinero a la Iglesia, pero no obtienen participaci¨®n.
En Portugal comenzaron en enero pasado. Desde el primer momento obtuvieron buena acogida entre algunos miembros de la jerarqu¨ªa, como el arzobispo de Braga, el obispo auxiliar de Lisboa y secretario de la Conferencia Episcopal, y los obispos de Aveiro y Set¨²bal, adem¨¢s de ¨®rdenes como los dominicos.
En Italia se han recogido 30.000 firmas, en Reino Unido 10.000 y en Holanda 4.000.
En Estados Unidos reconocen dificultades para llevar a cabo un "referendum" operativo. Lo achacan a la extensi¨®n geogr¨¢fica y a "una creciente indiferencia del cat¨®lico ante la Iglesia institucional".
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