Mercedes intenta salvar al modelo Clase A con una masiva campa?a publicitaria
DaimIer Benz inici¨® ayer una masiva campa?a publicitaria para salvar su pol¨¦mico utilitario, el Mercedes-Benz Clase A, tambi¨¦n conocido como Mercedes Baby. Los problemas de estabilidad de este veh¨ªculo, concebido para competir con otros utilitarios de clase media, han puesto a DaimIer Benz en una delicada situaci¨®n y le han obligado a suspender las entregas durante 12 semanas para modificar el modelo. El asunto ha empa?ado gravemente el prestigio de la compa?¨ªa, cuyos productos son considerados sin¨®nimo de calidad.
La campa?a de publicidad comprende un enorme anuncio, que debe ser publicado por 180 diarios alemanes, y una ofensiva personalizada por correspondencia con 400.000 cartas y 150.000 cintas de v¨ªdeo. "Queremos concluir la discusi¨®n sobre la seguridad del Clase A. Definitivamente", afirma el anuncio, insertado ayer en la prensa. El texto detalla las modificaciones que van a introducirse en el Clase A y pide "un poco de paciencia" a los clientes.El martes, Daimler Benz inform¨® que dejaba de distribuir el veh¨ªculo m¨¢s peque?o y m¨¢s moderno de su producci¨®n durante 12 semanas para instalarle un nuevo chasis y hacerle otras modificaciones, que complementan las que ya se hab¨ªan tenido que introducir anteriormente.
La empresa ha vendido un total de 2.600 veh¨ªculos Clase A y ha recibido 3.000 anulaciones de pedidos desde que se hicieron p¨²blicos los problemas de estabilidad que pueden afectar al utilitario en ciertas condiciones extremas. El pasado 21 de octubre, en un aeropuerto sueco, el Mercedes Baby fall¨® en una maniobra que en Suecia se denomina la prueba del alce, porque equivale a la maniobra que habr¨ªa que realizar para esquivar sin frenar a uno de estos animales si apareciera de repente en una carretera n¨®rdica.
Modificaciones millonarias
Daimler Benz tuvo que admitir que el veh¨ªculo puede llegar a volcar en la prueba y trat¨® de solucionar el problema con modificaciones limitadas, incluidos nuevos neum¨¢ticos, que implicaban costes suplementarios de 50 millones de marcos (4.200 millones de pesetas). El martes, Ia empresa tuvo que dar un nuevo paso y tom¨® medidas de m¨¢s envergadura.Aparte de los da?os de imagen, la factura se eleva ahora a 100 millones de marcos (8.400 millones de pesetas) para 1997, seg¨²n estimaciones de la empresa. La producci¨®n, que era de 300 coches por d¨ªa a mediados de octubre, bajar¨¢ a 200 diarios y se mantendr¨¢, en este nivel hasta febrero. Los propietarios de los Clase A recibir¨¢n otro modelo Mercedes mientras sus veh¨ªculos son reformados en centros de servicio especiales.
De momento, DaimIer Benz no est¨¢ dispuesta a renunciar a la paternidad del Mercedes Baby o a esconderlo al p¨²blico. El coche se exhibe hoy en el lugar de honor del nuevo edificio bandera de la compa?¨ªa en Berl¨ªn, en la plaza de Postdam n¨²mero 1, que ha sido dise?ado por el arquitecto Renzo Piano, autor de la pir¨¢mide del Louvre de Par¨ªs. El pol¨¦mico utilitario est¨¢ en el centro de un atrio que recuerda una nave de iglesia. Un portavoz de la empresa inform¨® que "el veh¨ªculo est¨¢ y seguir¨¢ all¨ª".
El peri¨®dico sensacionalista Bild Zeitung concedi¨® ayer el premio Volante de Oro (Goldenen Lenkrad), destinado al mejor desarrollo t¨¦cnico en la industria automovil¨ªstica, al Clase A, a pesar de su mala imagen y de la pol¨¦mica que el galard¨®n ha suscitado en la redacci¨®n del diario. Para que el jurado se tranquilizara fue necesario que uno de sus miembros, el corredor profesional Rauno Aaltonen, hiciera 38 veces la prueba del alce con un veh¨ªculo ya modificado.
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