Guardias y gitanos, contra la xenofobia
Un distendido partido de f¨²tbol en Priego de C¨®rdoba rompe con los t¨®picos
Priego de C¨®rdoba, un hermoso pueblo de 22.000 habitantes, se encarg¨® ayer de pasar la p¨¢gina sobre el t¨®pico de los t¨®picos racistas que se arrastra de la Espa?a de la posguerra: la enemistad del gitano y el guardia civil. El a?o internacional contra el racismo y la xenofobia se ha celebrado en esta localidad con un partido de f¨²tbol entre gitanos y guardias civiles, que concluy¨® con vivas a la Benem¨¦rita en el vestuario del Cal¨¦s FC y con un resultado (2-1) a favor del Deportivo Benem¨¦rita, que no se dej¨® robar balones por sus contrincantes. La deportividad en ambos conjuntos fue exquisita. Ninguna tarjeta tuvieron que ense?ar los ¨¢rbitros a los jugadores.Fue un d¨ªa de convivencia que concluy¨® con una copa e intercambio de trofeos y recuerdos y en el que, como dec¨ªa Jos¨¦ Heredia, uno de los gitanos que entre el p¨²blico animaba a su equipo, cabe celebrar "que ya no van los civiles corriendo detr¨¢s de los gitanos, sino todos corriendo juntos".
La idea del encuentro se le ocurri¨® a Anacleto Carmona, secretario'de Solidaridad y Cooperaci¨®n,del PSOE de Priego de C¨®rdoba y miembro de la comunidad gitana de este municipio, formada por unas 250 personas. Este pol¨ªtico local acudi¨® el 12 de octubre ¨²ltimo a la fiesta de la Guardia Civil y all¨ª le lanz¨® el desaf¨ªo al sargento del puesto, que recibi¨® la propuesta con entusiasmo.
Montar el partido fue coser y cantar, ya que el Cal¨¦s FC encontr¨® abundante cantera entre Priego y Carcabuey, un pueblo vecino. La Guardia Civil, que tiene pocos efectivos en estas localidades, difundi¨® la convocatoria entre varios pueblos, y el Deportivo Benem¨¦rita se form¨® con voluntarios de Priego, Lucena, Rute y Carcabuey, adem¨¢s de varios polic¨ªas locales.
Dice Anacleto Carmona que el partido de f¨²tbol no persigue la integraci¨®n, puesto que en su pueblo no han surgido problemas entre gitanos y payos, sino m¨¢s bien la convivencia entre personas que ya se conocen, el fomento de la simpat¨ªa mutua y combatir el t¨®pico. Igual piensa el alcalde, el socialista Tom¨¢s Delgado, que actu¨® de ¨¢rbitro hasta que acab¨® sin resuello y fue sustituido por el cura Paco, p¨¢rroco de la iglesia del Carmen y linier hasta el agotamiento de la autoridad municipal.
Ambos pitaron ligeramente a favor del Cal¨¦s FC, que tambi¨¦n cont¨® con el respaldo de la gran mayor¨ªa de las 2.000 personas que acudieron al encuentro. Cuando el cura Paco anul¨® un gol a los payos, se oy¨® gritar "?milagro!" en las gradas y en el propio campo, aunque tambi¨¦n anul¨® otro gol a los cal¨¦s entre una estruendosa bronca.
El alcalde considera que m¨¢s que integraci¨®n debe perseguirse la igualdad social entre gitanos y payos, y comenta que en su pueblo no hay problemas y que incluso se dan los matrimonios mixtos, como el del propio Anacleto Carmona, casado con una mujer no gitana. Y, siguiendo con los s¨ªmbolos, los contendientes rompieron una lanza por la gualdad de la mujer y reclamaron para el puesto de juez de l¨ªnea a la concejal de Servicios Sociaes de Priego de C¨®rdoba, Gracia Reyes, que acept¨® encantada.
Por su parte, el teniente de la Guardia Civil Manuel Pozo recalc¨® el car¨¢cter amigable y de hermandad de esta contienda, y se?al¨® que no fue organizada por la instituci¨®n armada, sino a t¨ªtulo particular por los guardias que han querido participar en el encuentro y que, por cierto, demostraron una mejor preparaci¨®n f¨ªsica que sus contrarios, hasta el punto de que ,,en varias ocasiones los hemos tenido cercados", como comentaba humor¨ªsticamente Manuel P¨¦rez, guardia de Carcabuey.
Antonio Heredia, delantero combativo de los cal¨¦s, argumenta que s¨®lo han podido entrenar tres semanas para prepararse para el partido, "pero en el pr¨®ximo nos comemos a los civiles". Ellos mismos, los jugadores de este singular encuentro, ironizaban sobre el t¨®pico que ha ligado al guardia civil y al gitano en la realidad, en el chiste y en la copla, pero son personas que conviven a diario y que se respetan.
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