"El p¨²blico madrile?o percibe la m¨²sica con sensibilidad femenina"
Una de las formaciones europeas m¨¢s fascinantes de la d¨¦cada vuelve a los escenarios madrile?os tras un par¨¦ntesis de casi tres a?os. La poes¨ªa melanc¨®lica de Madredeus, impregnada de la esencia de esas barriadas lisboetas revestidas de azulejos y del salitre de la brisa atl¨¢ntica, se despleg¨® por las gradas del Monumental en sus actuaciones de 1994 y 1995, a?os en. los que el grupo encaden¨® 40 conciertos espa?oles en los que s¨®lo dos entradas se quedaron sin vender. Ahora, superada la marcha de dos de sus miembros (Francisco Ribeiro al violonchelo y el acordeonista Gabriel Gomes), regresan a la actualidad con otro hermoso disco, O para¨ªso, en el que la voz estremecedora de Teresa Salgueiro canta al amor y la tempestad, a las noches y sus sue?os. Pedro Ayres Magalh¨¢es, fundador y guitarrista de la banda, adem¨¢s de ide¨®logo y autor de gran parte del repertorio, admite que este para¨ªso musical ha bebido mucho de sus viajes por tierras espa?olas.Pregunta. ?Puede capturarse, a lo largo de una acelerada gira, el esp¨ªritu de un pa¨ªs?
Respuesta. En el caso de la gira de 1995 s¨ª que tuvimos tiempo de comprender algo de esa diversidad espa?ola, una vivencia, por cierto, que en O para¨ªso se refleja de forma decisiva. Haja que houver la escrib¨ª en un caser¨ªo vasco, pero el esp¨ªritu de aquellos d¨ªas recorre todo el ¨¢lbum,
P. ?Tocar en Espa?a impone respeto a los guitarristas?
R. Sin duda. En mi primer concierto espa?ol sent¨ª entre miedo y recelo, y me dec¨ªa: "Pedro, t¨®cala bien, que aqu¨ª no sirve cualquier cosa ..." .Cuando personas del p¨²blico empezaron a decirme que encontraban expresivas y originales nuestras guitarras, al mismo tiempo alejadas del flamenco y de la cl¨¢sica, me quit¨¦ un enorme peso de encima.
P. Hombre, situados en esa tesitura, son ustedes m¨¢s cl¨¢sicos que flamencos...
R. Lo que sucede es que la guitarra cl¨¢sica en Portugal se identifica con eventos elitistas, con los conciertos en alguna sala rec¨®ndita de un tipo que toca para 20 iluminados y luego se va. Madredeus no se basa en la complejidad ni en el virtuosismo: s¨®lo en la comunicaci¨®n.
P. La diversidad de Espa?a, ?se refleja en su p¨²blico?
R. S¨ª, y es muy, curioso. Los catalanes, que c¨®nocen el la¨²d y la cl¨¢sica, se fijan en la t¨¦cnica, del mismo modo que por el sur reparan en el duende, en eso. de si la m¨²sica se siente o no. En Madrid, la atenci¨®n es m¨¢s dispersa: atienden a la imag¨¦n,. a las palabras, a la figura de Teresa... .El p¨²blico madrile?o percibe la m¨²sica en s¨ªntesis; es una sensibilidad m¨¢s femenina.
P. ?Y los gallegos?
R. Ellos se quedan con la inspiraci¨®n, reconocen ritmos y melod¨ªas, desentra?an lo que est¨¢ dentro.Madredeus. Este domingo, a las 20.00, en el Palacio de Congresos (paseo de la Castellana, 99). Localidades agotadas.
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