El Tenerife sigue en el bache
La Real no aprovech¨® el estado an¨ªmico de los tinerfe?os
El Tenerife sigue sin superar la grave crisis por la que atraviesa esta temporada y deja su posible recuperaci¨®n para el pr¨®ximo a?o. El inicio de 1998 ser¨¢ clave para el futuro del equipo canario que ayer tampoco pudo ganar a la Real Sociedad y se mantiene en el pen¨²ltimo puesto. Despu¨¦s de las fiestas navide?as al conjunto de Artur Jorge le espera un calendario complicado, puesto que se enfrentar¨¢ a rivales directos en la lucha por la permanencia como son Valencia, Deportivo, Sporting y Compostela.El partido de ayer fue un calco de otros anteriores. Muchos nervios, poca claridad de ideas y desesperaci¨®n a la hora de atacar. En esta ocasi¨®n fue la Real Sociedad la que trunc¨® las esperanzas tinerfe?as y con un primer tiempo con opciones de gol y una segunda mitad con muchas m¨¢s reservas defensivas se hizo con un punto que le hace mantenerse en la parte alta de la tabla.
El equipo donostiarra parec¨ªa dispuesto desde el principio a aprovecharse de la debilidad an¨ªmica y de juego de su rival. Los cinco defensas que coloc¨® Jorge para evitar problemas en la retaguardia no pudieron, sin embargo, neutralizar muchas de las acometidas de los jugadores de ataque del conjunto de Krauss. En la primera media hora de juego, los donostiarras dispusieron de opciones claras de gol, pero la falta de punter¨ªa y los reflejos de Ojeda impidieron que la Real se adelantara en el marcador. El Tenerife jugaba a impulsos y las pocas llegadas al ¨¢rea rival tampoco fueron aprovechadas por los hombres de ataque.
En la reanudaci¨®n, el Tenerife tom¨® conciencia de la importancia de los puntos y con Robaina en el campo mejor¨® en las jugadas de ataque. El jugador gran canario se responsabiliz¨® de todos los balones y llevaba constante peligro con sus centros, pero los remates de los compa?eros, en especial los de Llorente, no encontraron las mallas de la porter¨ªa rival, entre otras cosas, porque Alberto estuvo acertado.
La Real perd¨ªa con facilidad el bal¨®n y s¨®lo trataba de sorprender con contraataques. Aunque los ¨²ltimos minutos fueron intensos por lo incierto del marcador, la impresi¨®n general era de que el marcador no se mover¨ªa, como as¨ª ocurri¨® al final.
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