S¨ªndrome de El Ejido
El editorial de EL PA?S del 22 de diciembre de 1997, S¨ªndrome de El Ejido, me ha dejado confuso.Expongo mi situaci¨®n por si ayuda a ver mi punto de vista, muy diferente del de ustedes.
Desde hace seis meses, un bar que se encuentra cercano al peque?o negocio que tiene mi mujer est¨¢ ayudando al cierre de varias tiendas del entorno. El primero de los negocios ya ha cerrado y se ha ido a otra zona. El bar est¨¢ frecuentado por personas que parecen ser emigrantes. Sin pruebas no puede poner m¨¢s adjetivos al nombre de personas.
Dos veces EL PA?S del Pa¨ªs Vasco ha publicado la foto de ese bar. Una de ellas para dar cuenta de una redada policial por drogas y la otra para ilustrar un art¨ªculo de opini¨®n sobre violencia.
El mismo d¨ªa que publicaban el editorial S¨ªndrome de El Ejido mi mujer fue amenazada por dos personas, que parec¨ªan emigrantes y de color, con colocarle una
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bomba en la tienda. Motivo de la amenaza: hablar con dos ertzainas que entraron en nuestra tienda. (Se adjunta fotocopia de la denuncia ante la comisar¨ªa correspondiente).
Soy lector de EL PA?S desde sus primeros n¨²meros de mayo de 1976. He sentido con ustedes ciertas acciones que yo tambi¨¦n he considerado un acoso contra el Grupo PRISA. ?Qu¨¦ he de pensar o hacer ahora ante el acoso contra nuestro negocio tras 10 a?os de existencia y que puede ser hundido por esos emigrantes?: Callar. Y dentro de poco tiempo dejar de comprar EL PAIS (despu¨¦s de 21 a?os) porque la tienda dejar¨¢ de darnos ingresos-
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