Heynckes accedi¨® al doble pivote

, Fue un Madrid lleno de precauciones, ajeno a los riesgos. No fue su actitud, hasta la salida de Savio, la de un equipo grande. Jupp Heynckes, no se sabe si forzado por la presi¨®n de los jugadores y los directivos, recurri¨® a la f¨®rmula del doble pivote (la que gui¨® al Madrid en la era Capello y que ha sido materia de debate en el vestuario desde el principio de curso) y plante¨® el encuentro en funci¨®n del rival, m¨¢s pendiente de sujetarlo que de desbordarlo.

Heynckes lleva insistiendo media Liga en que los problemas defensivos del equipo no eran una cuesti¨®n de sistema, sino de actitud. Pero su primera medida para corregir las lagunas advertidas en su retaguardia ha sido modificar el sistema, una decisi¨®n que arroja una sombra preocupante sobre su autoridad. Los futbolistas insist¨ªan, algunos directivos tambi¨¦n, y Heynckes parece haber optado por ceder. Volvi¨® el doble pivote: Jaime y Redondo.

Ayer, a la conclusi¨®n del encuentro, el alem¨¢n trat¨® de restar importancia a la modificaci¨®n t¨¢ctica. "Se ha escrito y hablado mucho sobre el esquema", dijo, "pero lo m¨¢s importante son los jugadores y la actitud que tengan en ataque y en defensa. Adem¨¢s, en los ocho primeros partidos ya jugamos con doble pivote [s¨®lo en los tramos finales de los partidos]. No es algo nuevo, me parece". Cuando se le pregunt¨® si no se trataba de un planteamiento demasiado conservador para un equipo de la entidad del Madrid, Heynckes distribuy¨® culpas: "Los dos equipos salimos con muchas precauciones".

No fue de la misma opini¨®n Radomir Antic, que s¨®lo vio gestos de cautela en el Madrid, que "prepar¨® el partido para no encajar un gol". El t¨¦cnico serbio no se vio sorprendido tanto por el dibujo t¨¢ctico como por la actitud de su rival: "No es s¨®lo una cuesti¨®n de esquemas. El Madrid nos tuvo mucho respeto. En el primer tiempo, casi no nos hizo nada. S¨®lo se preocup¨® de defendernos. Pero esto es f¨²tbol, y al final tuvieron oportunidad de ganar el partido". Y apostIll¨®: "El partido no tuvo tantas alternativas como las esperadas por el conservadurismo del Madrid".

Para Ca?izares, el Madrid no tom¨® excesivas precauciones. Tom¨® las justas. "Un equipo", dijo, "tiene que salir con la idea de que lo importante es que no le hagan un gol. Si conservas tu porter¨ªa a cero, es evidente que gracias a la calidad que tenemos arriba siempre podremos conseguir un gol. Como as¨ª ha sido. Hemos jugado al Atl¨¦tico como se le debe jugar".

El Madrid cambi¨® de t¨¢ctica en busca de una mejor¨ªa defensiva. Y nadie mejor que su guardameta para juzgar si los efectos perseguidos se consiguieron. ?Se sinti¨® mejor protegido que otras veces? "La eficacia de un sistema se ve a trav¨¦s de muchos partidos". "Y adem¨¢s", a?adi¨® como dando la raz¨®n a su t¨¦cnico, "un sistema lo hace la actitud de los jugadores. Y hoy todos, la verdad, hemos tenido una actitud fant¨¢stica".

A Ca?izares le gust¨® el planteamiento del Madrid. A la mayor¨ªa del equipo tambi¨¦n. No en vano el conjunto blanco jug¨® como ven¨ªa reclamando el vestuario desde el comienzo de Liga. Desde el primer partido, en el derby de la primera vuelta, empez¨® la cantinela. Entonces, Redondo y Sanchis hasta se atrevieron a pronunciarse p¨²blicamente sobre la conveniencia de reforzar el centro del campo con un doble pivote. Es decir, que se volviera a la f¨®rmula empleada por Capello en la temporada anterior. Con el paso de los d¨ªas, el debate creci¨®. Y se unieron a ¨¦l aficionados y directivos. Todos reclamaban m¨¢s solidez defensiva. Heynckes, que s¨®lo cre¨ªa en el doble pivote como medida de emergencia, ha terminado por hacerles caso. El Madrid no sali¨® ganando con el cambio. Y el principio de autoridad de Heynckes probablemente tampoco.