Prosigue el descr¨¦dito del Madrid
El Alav¨¦s, con un juego directo y lleno de entusiasmo, super¨® al equipo de Heynckes
, El Madrid prosigue en su descr¨¦dito. Sali¨® derrotado de Mendizorroza y no nadie encontrar¨¢ una excusa para justificar el resultado. Lleno de entusiasmo y coraje, el Alav¨¦s puso las condiciones del partido, que fue intenso, f¨ªsico y rap¨ªdisimo. Es decir, todo lo que puso el Alav¨¦s. Porque el Madrid no puso nada. Jug¨® mal en todos los aspectos, sin categor¨ªa para rebajar la tromba del equipo local.
A las caracter¨ªsticas del Alav¨¦s se le a?adi¨® la desidia ¨²ltima del Madrid, que no encontr¨® soluciones para desbaratar el juego vigoroso y r¨¢pido de su rival. La ubicaci¨®n de Karembeu junto a Redondo se pudo interpretar como un s¨ªntoma de lo que suceder¨¢ en el futuro. Heynckes parece dispuesto a jugar con dos centrocampistas de contenci¨®n, cosa que ni es buena ni mala, pero que necesita trabajarse. Al Madrid le ha faltado un punto de intensidad que se ha traducido en varios goles de dif¨ªcil explicaci¨®n. Desde el lado ¨¢nimo, es evidente que el equipo ha perdido el car¨¢cter marcial que ten¨ªa con Capello. Hay jugadores que se han tomado el nuevo grado de libertad con demasiada ligereza. Algunos de ellos son los que m¨¢s se quejaban en privado del f¨²tbol militarista y mec¨¢nico que propugnaba el entrenador italiano. Por esa vertiente hay una responsabilidad evidente de los jugadores en la p¨¦rdida de voltaje del equipo. Pero tambi¨¦n hay cuestiones t¨¢cticas que parecen poco trabajadas.
El Madrid tira la l¨ªnea defensiva demasiado atr¨¢s y no se agrupa. Los delanteros se ocupan poco de la presi¨®n y en el medio campo se produce una fractura evidente. En general el equipo es demasiado largo, con zonas demasiado blandas. Esta es una cuesti¨®n que afecta a Heynckes, que no ha encontrado la tecla para armar t¨¢cticamente al Madrid. En el aspecto defensivo, es un equipo muy poco trabajado. La inclusi¨®n de Karembeu como segundo medio defensivo explica el debate que se ha generado en el club. Al Madrid le vendr¨¢ de perlas un jugador de sus caracter¨ªsticas: vital, r¨¢pido y potente. Con una cualidad a?adida, porque Karembeu parece inteligente para desprenderse de su posici¨®n y progresar hacia el ¨¢rea rival. Algo de eso se vio en un par de ocasiones frente al Alav¨¦s. A Karembeu le falta el punto de tacto con la pelota que se pierde despu¨¦s de una larga inactividad. En el plano f¨ªsico, perdi¨® gas en el segundo tiempo y fue sustituido. Lo mejor de Karembeu se vio en el ¨²ltimo minuto del primer tiempo. Recuper¨® la pelota, sali¨® con rapidez por la derecha y meti¨® un excelente pase con comba que Morientes estuvo a punto de aprovechar. Desbord¨® al portero, pero Berruet sac¨® el bal¨®n en la raya de gol. Fue la ¨²nica ocasi¨®n madridista en el primer tiempo. Todo lo dem¨¢s lo puso el Alav¨¦s. A trav¨¦s de la presi¨®n consigui¨® frecuentemente la pelota.
En una de las m¨²ltiples incursiones de Serrano se produjo el momento m¨¢s discutido del encuentro. Redondo perdi¨® el bal¨®n en el medio campo y el Alav¨¦s sali¨® r¨¢pido, en busca de Serrano, que meti¨® el centro hacia el segundo palo, donde apareci¨® Pedro Riesco para marcar. Redondo, que le persegu¨ªa, le empuj¨® con tanta claridad que nadie entendi¨® la inhibici¨®n del ¨¢rbitro. La gente reclam¨® el penalti y la expulsi¨®n de Redondo. Y con raz¨®n. S¨®lo se advirti¨® alguna novedad en el comienzo del segundo tiempo. El Madrid consigui¨® actuar con un poco de equilibrio y saco una oportunidad estupenda en un cabezazo de Morientes que se estrell¨® en el larguero.
La recuperaci¨®n del Madrid fue ficticia. Se descosi¨® de nuevo y se vio envuelto en el torbellino del Alav¨¦s, que volvi¨® a su juego sin concesiones. Si el Madrid no andaba atento, el gol del Alav¨¦s era muy probable. El partido le pertenec¨ªa. El momento lleg¨® en una acci¨®n que puso de manifiesto el sentido de la oportunidad de Serrano -el protagonista de la noche- y en el desajuste de la defensa madridista. Ni Sanz ni Karanka encimaron al delantero.
El gol multiplic¨® las condiciones del partido. El Alav¨¦s prosigui¨® en su ataque y estuvo cerca de conseguir el segundo tanto -Karmona envi¨® al larguero un cabezazo ante la mirada indiferente de los defensas-. El Madrid se empeque?eci¨® hasta extremos alarmantes. Todo su capital fue un buen cabezazo de Morientes que sali¨® junto al palo. Pero la oportunidad casi pareci¨® anecd¨®tica. En lo sustancial, volvi¨® a ser un equipo muy decepcionante.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.