Un monta?ero se despe?a por una ladera helada de Navacerrada
Un monta?ero, Miguel ?ngel C., de 38 a?os, se despe?¨® ayer, pasado el mediod¨ªa, mientras realizaba una ascensi¨®n a una cumbre helada de Navacerrada. En la ca¨ªda se golpe¨® contra las rocas, hasta que una m¨¢s grande consigui¨® pararle. Sufre traumatismo craneoencef¨¢lico grave y numerosos golpes por todo el cuerpo. Un helic¨®ptero de la Comunidad aterriz¨® en plena monta?a para el rescate y traslad¨® al herido al hospital Doce de Octubre. Anoche, pasadas las once, Miguel ?ngel permanec¨ªa hospitalizado en el centro sanitario, pero ya hab¨ªa salido de la unidad de cuidados intensivos.El monta?ero estaba acompa?ado de seis compa?eros. El grupo se hab¨ªa propuesto en la soleada pero g¨¦lida jornada de ayer un reto complicado en esta ¨¦poca del a?o: ascender al pico de Cabeza de Hierro, que, con sus 2.380 metros de altitud, es el segundo m¨¢s alto de la Comunidad, despu¨¦s del de Pe?alara (de 2.428 metros de altitud).
Para endurecer el grado de dificultad, los excursionistas abordaron la monta?a por la cara norte. Esa ladera tiene una pendiente muy fuerte, y como apenas le pega el sol, estaba cubierta por el hielo. Eran casi las dos de la tarde cuando los camprones (suela que se acopla a las botas y va provista de tacos met¨¢licos y puntiagudos) de Miguel Angel no se clavaron con suficiente profundidad en el hielo. Cay¨® rodando 150 metros monta?a abajo por la enorme placa de hielo.
Los miembros del Grupo Especial de Rescate en Altura (GERA), formado por bomberos de la Comunidad de Madrid, que estaban de pr¨¢cticas ese d¨ªa a poca distancia del lugar del suceso, presenciaron la ca¨ªda: "Est¨¢bamos ayudando a unos ni?os a bajar de la ladera cuando escuchamos un grito y vimos el cuerpo caer", explic¨® uno de los bomberos.
"Se estaba agrupando con otro compa?ero porque a partir del punto en el que estaban ya s¨®lo se pod¨ªa subir haciendo escalada y clavando enganches en el hielo", explicaba anoche un miembro del equipo de rescate.
Golpes repetidos
"Hasta all¨ª subieron sueltos, ayud¨¢ndose con el piolet, como tercer punto de apoyo: Pero llegaron hasta el punto de la ladera a partir del cual hay que atarse y tomarse la excursi¨®n como una aut¨¦ntica escalada por una pared de hielo", a?adi¨®. "En ese momento de pausa, se resbal¨® y cay¨®. Se fue golpeando con las rocas hasta que una grande le par¨®", explic¨®. Miguel ?ngel sufri¨® dos brechas en la cabeza, de las que sal¨ªa sangre en abundancia, un ojo cerrado de un golpe, dolores fuertes en las costillas y en la cadera, explica el bombero. "Estaba semiinconsciente y preguntaba todo el rato lo mismo. "No entend¨ªa lo que le dec¨ªamos", concluy¨®. Diez minutos despu¨¦s de que Miguel ?ngel se despe?ara, una excursionista de 17 a?os se cay¨® en Pe?alara y se fractur¨® las mu?ecas y una pierna.
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