El d¨¦ficit del Estado baj¨® un 44,4% en 1997, aunque rebas¨® 206.100 millones lo presupuestado

El d¨¦ficit de caja no financiero del Estado alcanz¨® en 1997 los 2,048 billones de pesetas lo que supone una reducci¨®n del 44,4% respecto al a?o anterior. Esta cifra es, sin embargo, 206.100 millones de pesetas superior a lo presupuestado debido a que los gastos se han desviado al alza 236.100 millones. Respecto a 1996, los pagos han aumentado un 2%, igual que la inflaci¨®n. Los ingresos han crecido un 13,7% en relaci¨®n a 1996 y pr¨¢cticamente se ajustan a lo previsto, pese a que por IRPF la recaudaci¨®n a sido 114.500 millones inferior. El Ministro de Econom¨ªa asegura que en 1997 se ha cumplido con holgura el criterio de Maastricht para el d¨¦ficit y lo estima en el 2,3% del Producto Interior Bruto (PIB).

Seg¨²n los datos publicados ayer por el Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda, el d¨¦ficit de caja del Estado (diferencia entre ingresos y pagos efectivamente realizados) se situ¨® en el nivel m¨¢s bajo de los ¨²ltimos cinco a?os.En cuando al d¨¦ficit de Maastricht (diferencia entre ingresos y pagos comprometidos, el criterio que servir¨¢ para el examen del euro), la previsi¨®n oficial es que el Estado cerrar¨¢ con una necesidad de financiaci¨®n del 2,3% del PIB, cuando lo fijado inicialmente era un 2,5%. Las cifras definitivas se dar¨¢n a conocer a mediados de febrero.

Al respecto, el secretario de Estado de Presupuestos, Jos¨¦ Folgado, asegur¨® ayer que para el conjunto de las Administraciones p¨²blicas (Estado, Seguridad Social, comunidades aut¨®nomas y ayuntamientos), la necesidad de financiaci¨®n se situar¨¢ en el 2,8% del PIB; es decir, una d¨¦cima menos de lo previsto y dos d¨¦cimas inferior al requisito para el euro (3%).

La recuperaci¨®n econ¨®mica, el adelanto de recaudaci¨®n en el impuesto de sociedades y el medio bill¨®n de pesetas obtenido por las privatizaciones explica la reducci¨®n del d¨¦ficit de caja por el lado de los ingresos.

Estos han crecido un 13,7% respecto a 1996, pero son 30.000 millones inferiores a lo presupuestado. El incremento de los ingresos m¨¢s que duplicar¨¢ el crecimiento econ¨®mico del a?o (en torno al 5% nominal, es decir, sin descontar la inflaci¨®n).

El aumento de la recaudaci¨®n por el impuesto sobre la renta respecto a 1996 (5,5%) est¨¢ en l¨ªnea con el crecimiento econ¨®mico esperado, aunque representa la mayor desviaci¨®n a la baja (114.500 millones) en los ingresos en relaci¨®n a lo previsto. Se explica, seg¨²n Econom¨ªa, por la celeridad en las devoluciones, aunque tambi¨¦n obedece al nuevo tratamiento fiscal de las plusval¨ªas y al descenso provocado en las retenciones de las rentas del capital.

La ca¨ªda en el IRPF se compensa con un incremento en el impuesto de sociedades, cuya recaudaci¨®n ha superado 142.300 millones lo previsto y ha crecido un 52,6% en relaci¨®n a 1996. El impuesto sobre el valor a?adido, con un crecimiento del 10,7%, pr¨¢cticamente igual a lo previsto, refleja claramente el tir¨®n del consumo privado.

Por el lado de los gastos, la desviaci¨®n respecto a lo previsto es de 236.100 millones al alza, aunque su crecimiento respecto a 1996 es un moderado 2%, igual que la inflaci¨®n del ejercicio. El principal incumplimiento presupuestario se ha producido en el cap¨ªtulo de transferencias corrientes, con 273.100 millones gastados de m¨¢s y un aumento del 3,8% sobre el -a?o anterior.

De esta partida, que ha superado los 10 billones de pesetas el pasado a?o, el mayor gasto es el que se deriva de las aportaciones a la Seguridad Social para financiar operaciones corrientes del Insalud (3,2 billones), que ha crecido un 15% sobre el a?o anterior. Aqu¨ª se incluye tambi¨¦n el adelanto de 40.000 millones de pesetas derivado del acuerdo con las comunidades aut¨®nomas para la financiaci¨®n sanitaria.

Le siguen las transferencias a las comunidades, incluidos los pagos a cuenta de la cesi¨®n del IRPF, que han ascendido a 2,5 billones y han aumentado un 24,3% respecto al a?o anterior o un 15,7% si se descuentan los traspasos en educaci¨®n universitaria. Pese al radical descenso de los tipos de inter¨¦s, los gastos financieros han crecido un 2% sobre 1996.