Cuando 'sexo' no equivale a acto sexual
Si el presidente Bill Clinton tuviera que afrontar el impeachment (destituci¨®n) por el esc¨¢ndalo Lewinsky se podr¨ªa apostar que las discusiones orales ya no ser¨ªan lo mismo. ?Es chiste? No, en absoluto. Es una posibilidad real, pues hay pruebas que sugieren que la cuesti¨®n de si es o no realmente sexo practicar el sexo oral -aunque suene a juego de adultos puede llegar a ser la base de la defensa legal de Clinton.La l¨®gica parece tan mortificante como una postura del Kama Sutra, pero el potencial argumento conduce a dos pasiones presidenciales b¨¢sicas: una todav¨ªa supuesta; la otra desde hace tiempo probada. La supuesta es la felaci¨®n. Seg¨²n un abogado que las ha escuchado, las cintas de Lewinsky muestran que cuando se llega a la intimidad, el imprudente Clinton se convierte en un puritano que juega a lo seguro. Refiri¨¦ndose jocosamente a s¨ª misma como la futura "asistente especial del presidente para felaciones", Monica Lewinsky cont¨® a Linda Tripp que Clinton era estricto y limitaba sus contactos al sexo oral. A su edad, supuestamente le inform¨® el presidente, "no puedes arriesgarte a tener relaciones sexuales".
La segunda, probada, pasi¨®n de Clinton -advertencia: se trata de un juego de palabras- es la lengua. Una y otra vez ha eludido a enemigos y cr¨ªticos recurriendo a inteligentes acertijos. ?Cu¨¢ndo un porro no es un porro? Clinton tuvo una respuesta para esta paradoja. Y seg¨²n uno de los trooper [polic¨ªa de Estado] de Arkansas envuelto en el esc¨¢ndalo Troopergate, el presidente puede incluso aportar una m¨¢s dif¨ªcil: ?Cu¨¢ndo se puede enga?ar a una esposa sin que lo desautoricen los Diez Mandamientos? El trooper en cuesti¨®n declar¨® a la revista sensacionalista American Spectator que recuerda que Clinton le dijo que hab¨ªa investigado el tema en la Biblia y llegado a la conclusi¨®n de que el sexo oral no es adulterio.
T¨¦cnica avanzada
Seg¨²n la ley, para cometer perjur¨ªo se tiene que haber dicho algo contrario a lo que uno cree que es verdad. Si Clinton cree que el sexo que ha negado haber practicado, y supuestamente ha intado a Lewinsky a negar tambi¨¦n no es realmente sexo sino una avanzada t¨¦cnica de masaje, es posible que pueda ser hallado culpable de un extra?o capricho religioso antes que de una serie de cr¨ªmenes federales.Todo ello nos lleva al venerable libro sobre el cual el presidente quiz¨¢ tenga alg¨²n d¨ªa que jurar. ?Qu¨¦ dice realmente la Biblia -que Clinton, un activo baptista, supuestamente consult¨® para aclarar su conciencia- sobre ¨ªntimos actos orales? Nada. Nada espec¨ªfico. Pero si uno lee entre l¨ªneas, no es bueno para el presidente. Es terrible. Seg¨²n el G¨¦nesis 38:8-10, Dios le manda a un hombre llamado On¨¢n que se case con la viuda de su hermano. Reacio a embarazarla, On¨¢n, practica el coitus interruptus y expulsa su semen sobre la tierra. ?C¨®mo trata Dios este desgaste seminal de On¨¢n?: "El Se?or se disgusta y le da la muerte".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.