El temor a crear alarma retras¨® la difusi¨®n de la noticia del crimen
La tardanza en la difusi¨®n de la noticia del atentado que cost¨® la vida al concejal Alberto Jim¨¦nez-Becerril y Ascensi¨®n Garc¨ªa sigue siendo inexplicable. A las dos de la madrugada del viernes, algo m¨¢s de media hora despu¨¦s del doble asesinato, la calle de Don Remondo era un hervidero de polic¨ªas y la zona estaba acordonada. Pero el primer periodista no lleg¨® hasta las 3.15 a la zona, que suele estar muy concurrida por ser una zona de bares. Sin embargo, esa noche hac¨ªa fr¨ªo y la clientela era muy escasa. Fuentes policiales achacan la tardanza a dos circunstancias: la incredulidad inicial ante un atentado en Sevilla -los tiros fueron confundidos con petardazos- y la reserva que impusieron las autoridades para no sembrar una alarma generalizada, debido a que en el barrio de Santa Cruz viven numerosos concejales y cargos p¨²blicos. La noticia, una vez confirmada la identidad de las v¨ªctimas, fue comunicada casi de inmediato al responsable municipal de Seguridad, al delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, que se hallaba en Madrid, a la alcaldesa Soledad Becerril, que vive a escasos cinco minutos a pie, y posteriormente a los familiares y al resto de los concejales. A las 3.30, un nutrido grupo de personas ten¨ªa noticia del asesinato. La informaci¨®n se difundi¨® en ese circulo con cierta rapidez, ya que se hizo todo lo posible por evitar que los afectados se enterasen por la radio (aunque la mayor¨ªa de las emisoras no tienen guardia nocturna).
"Nada raro"
El concejal delegado de Seguridad, Luis Miguel Mart¨ªn Rubio, el ¨²nico cargo municipal que vio los dos cad¨¢veres, no encuentra "ninguna explicaci¨®n a esa tardanza" ni cree que "haya nada raro". Mart¨ªn Rubio recuerda que tras el asesinato del concejal vasco Jos¨¦ Ignacio Iruretagoyena hab¨ªa hablado con el jefe superior de Polic¨ªa de Sevilla para organizar un plan encaminado a recordar a todos los posibles objetivos de ETA que deb¨ªan adoptar medidas de autoprotecci¨®n. El responsable de Seguridad reconoce que exist¨ªa cierto relajo en el dispositivo de autoprotecci¨®n por estar lejos del Pa¨ªs Vasco. "Quiz¨¢s estaba esa asignatura pendiente, pero estamos en Andaluc¨ªa, y para los etarras eran m¨¢s complicadas las entradas y las salidas, y porque en la ciudad hay muchos controles", dice. "Esto ha sido una llamada de atenci¨®n de que todos tenemos que tener mucho cuidado. Ma?ana me reunir¨¦ con la alcaldesa y le explicar¨¦ algunas de las medidas que nos han recomendado los responsables de Interior".
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