El FBI afirma que la CIA colabor¨® en 1995 en un plan para matar a Sadam

El Bur¨® Federal de Investigaci¨®n (FBI) investig¨® a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en 1995 por participar en un supuesto compl¨® para asesinar a Sadam Husein. La interceptaci¨®n de mensajes entre esp¨ªas iran¨ªes puso al FBI tras la pista de una conspiraci¨®n que violaba la prohibici¨®n norteamericana de implicarse en asesinatos pol¨ªticos, seg¨²n funcionarios del espionaje en activo y retirados.

El asesinato de Sadam era parte de un amplio plan de exiliados iraqu¨ªes y kurdos del norte de Irak para comenzar una ofensiva militar que esperaban que condujera a un alzamiento contra el l¨ªder iraqu¨ª, seg¨²n estas fuentes. Aunque la CIA, a trav¨¦s de sus agentes en el norte de Irak, ha estado apoyando a los grupos kurdos y a los exiliados iraqu¨ªes en el Congreso Nacional Iraqu¨ª, fuentes norteamericanas han dicho que no aprobaban el plan de invasi¨®n ni ning¨²n compl¨® para asesinar a Sadam Husein.En todo caso, el Consejo de Seguridad Nacional estudi¨® los mensajes iran¨ªes interceptados en los que se hablaba de esta conspiraci¨®n de la CIA para cometer un asesinato y los consider¨® lo suficientemente cre¨ªbles como para ordenar al FBI que los investigara. Los mensajes iran¨ªes fueron interceptados por una agencia de espionaje del Pent¨¢gono y enviados al citado consejo, seg¨²n las fuentes.

Cinco agentes de la CIA tuvieron que regresar del norte de Irak y someterse a un interrogatorio y a la prueba de la m¨¢quina de la verdad ante el FBI sobre la supuesta conspiraci¨®n de asesinato, seg¨²n Los Angeles Times. Otras fuentes dicen que los agentes de la CIA se quedaron sorprendidos y se enfadaron cuando fueron recibidos por agentes del FBI que les informaron de su derecho legal a un abogado y les comunicaron que estaban bajo investigaci¨®n.

Los esp¨ªas fueron expulsados, seg¨²n las fuentes. La CIA nombr¨® para el caso a un inspector general que deb¨ªa evaluar si sus carreras hab¨ªan sido perjudicadas injustamente. Entonces, algunos recibieron condecoraciones por su trabajo en Irak, seg¨²n fuentes de la agencia. Uno de los agentes devolvi¨® la suya, seg¨²n una fuente. La CIA rehus¨® comentar p¨²blicamente la investigaci¨®n del FBI.

Baja moral

El incidente se sum¨® a la baja moral que ya se respiraba en el' brazo clandestino de la agencia, la Direcci¨®n de Operaciones (DO), y aument¨® el resentimiento entre los agentes m¨¢s veteranos del caso contra la Administraci¨®n de Bill Clinton, y particularmente contra Anthony Lake, el jefe del Consejo Nacional de Seguridad, por sus visiones cr¨ªticas de las actividades secretas. La DO ya se encontraba cuestionada por su fracaso en el caso del esp¨ªa sovi¨¦tico confeso Aldrich H. Ames y por las cr¨ªticas a sus actividades pasadas en Centroam¨¦rica.El presidente George Bush autoriz¨® en 1991 acciones secretas contra Irak, incluyendo el apoyo a golpes militares que pudieran tener como resultado indirecto la muerte de Sadam Husein. Pero una orden previa, firmada por el presidente Gerald Ford, proh¨ªbe a los funcionarios de EE UU o a cualquiera que act¨²e en su nombre comprometerse en una conspiraci¨®n o en un compl¨® espec¨ªficamente dise?ado para que culmine con un asesinato.

La cuesti¨®n de asesinar a Sadam Husein ha sido propuesta recientemente por diputados y comentaristas de prensa que urgen a la Administraci¨®n de Clinton para que adopte medidas militares para derrocarle. Hablando del caso de 1995, un ex esp¨ªa fue muy cr¨ªtico con la decisi¨®n de iniciar una investigaci¨®n criminal basada en buena parte en mensajes iran¨ªes, que dijo que deber¨ªan ser considerados "plausibles". "Cuando trabajas con grupos de exiliados", observa el funcionario, "alguien siempre habla de asesinato y otros lo captan. Eso no significa que vayan a hacerlo de verdad".

Una segunda operaci¨®n de la CIA en Irak entre 1994 y 1995 implicaba el apoyo a ex miembros del Ej¨¦rcito iraqu¨ª exiliados. Con base en Amm¨¢n (Jordania), los esp¨ªas exiliados estaban deseando provocar un golpe en el que el l¨ªder iraqu¨ª fuera echado del poder. El apoyo de la CIA a estos esfuerzos no iba contra la mencionada orden, porque matar a Sadam Husein no era el objetivo del golpe, seg¨²n fuentes de la agencia, que se?alan que varios comit¨¦s del Congreso aprobaron el plan. Al parecer, los conspiradores ten¨ªan infiltradas en sus filas fuerzas de seguridad iraqu¨ªes y el plan fall¨®.