Otra tarde del Sporting para olvidar

Pasado el fervor de la primera victoria, el sportinguismo empieza a desentenderse del equipo en su temporada m¨¢s aciaga. Todo era favorable para el Valladolid ayer y lo rentabiliz¨® con el m¨ªnimo esfuerzo. Aguant¨® el empuje inicial gijon¨¦s y esper¨® dos fallos para marcar los goles que le alejan de la zona peligrosa.

La mayor ovaci¨®n del escaso p¨²blico que acudi¨® ayer al campo fue para el gol de Juanele al Madrid en Tenerife. Todo un s¨ªntoma de la realidad actual del Sporting. Atrapado entre un hoy lamentable y un ma?ana incierto, el p¨²blico de Gij¨®n se vuelca con su pasado m¨¢s glorioso. La imagen de Juanele en el video-marcador saludando tras el gol a Ca?izares fue lo m¨¢s emotivo en otra tarde-noche para olvidar.

El arre¨®n inicial del Sporting apenas s¨ª sirvi¨® para provocar un par de barullos en el ¨¢rea, antes de que el Valladolid Firmase una jugada limpia que acab¨® con un remate embarullado pero suficiente para enga?ar a Lekovic. El sustituto de Ablanedo agot¨® ayer su cr¨¦dito y la gente empez¨® a dedicarle el mismo tratamiento que a su antecesor, con silbidos y murmullos cada vez que le llegaba el bal¨®n.

Con el segundo gol el partido ya perdi¨® todo el inter¨¦s porque era una utop¨ªa pensar en un resurgimiento del colista de la Liga. Ni siquiera con el bal¨®n en el punto de penalti pudo marcar el Sporting, cuando al borde del descanso Luna forz¨® la ca¨ªda ante C¨¦sar. Nikiforov, un consumado especialista antes de su llegada a Gij¨®n, arruin¨® las m¨ªnimas esperanzas de ver un segundo tiempo interesante.

Con El Molin¨®n casi vac¨ªo el segundo tiempo se convirti¨® en un tr¨¢mite insufrible. S¨®lo fue apto para el medio millar de aficionados del Valladolid que asistieron con toda tranquilidad a 45 minutos para la basura. El Sporting forz¨® alguna oportunidad, pero repiti¨® los fallos que le han hecho acreedor a la verg¨¹enza de ser el equipo con peor puntuaci¨®n de las principales ligas europeas.

El gol postrero de Trotta, que el p¨²blico casi ni celebr¨®, fue una especie de venganza personal del argentino contra D¨ªaz Novoa. El t¨¦cnico asturiano le tuvo cinco jornadas consecutivas fuera del equipo.