Israel, siempre culpable

Israel tiene la culpa de que el mundo est¨¦ atacando a Sadam Husein, el inocente.Israel tiene la culpa de que el mundo no consiga golpear fuertemente al terrible Sadam Husein, ya que Israel impide la creaci¨®n de una coalici¨®n antiiraqu¨ª.

Israel ha enviado a Monica Lewinsky, agente jud¨ªa, para que seduzca al presidente Clinton, y luego hizo estallar el caso para da?ar al presidente americano.

?Citas de una revista humor¨ªstica? ?Citas de la revista del partido Baaz en Siria? ?Citas de un panfleto antisemita de la extrema derecha? No. Son ideas, afirmaciones y teor¨ªas publicadas en las ¨²ltimas semanas por el diario EL PA?S.

?Qu¨¦ tipo de obsesi¨®n puede llevar a un peri¨®dico serio y responsable a involucrar al Estado de Israel en cualquier acontecimiento o crisis que se produzca en el mundo? Me limitar¨¦ a exponer algunos hechos que a lo mejor sirven para esclarecer la verdad.

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Estados Unidos y otros pa¨ªses est¨¢n implicados en una crisis con Irak porque su l¨ªder dictatorial est¨¢ amenazando la estabilidad regional y mundial con armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas que ha fabricado y almacenado con intenci¨®n de utilizarlas. Israel no es parte de esta crisis, aunque s¨ª que es una posible v¨ªctima de un ataque de misiles.

El hecho de que los pa¨ªses ¨¢rabes no se hayan apuntado esta vez a la coalici¨®n contra Sadam Husein se debe a sus consideraciones a largo plazo, a que ven en Sadam Husein una amenaza que seguir¨¢ planeando sobre sus cabezas mucho tiempo despu¨¦s de acabarse este conflicto, y a su temor a que les conquiste en el futuro. Las actuales dificultades en el proceso de paz palestino-israel¨ª tienen una influencia m¨¢s ret¨®rica que real sobre estas consideraciones.

En el campo palestino volvemos a ver expresiones del profundo odio que albergan. Los mismos que en 1991 bailaron en los tejados de sus casas al ver caer los misiles Scud sobre Tel Aviv son los que hoy se manifiestan por las calles incitando a Sadam a destruir Israel. En 1991 no hab¨ªa un proceso de paz. En Israel estaba en el poder el Gobierno del Likud de Yitzhak Sham¨ªr, un Gobierno por cuya imaginaci¨®n tan siquiera pas¨® la posibilidad de congelar los asentamientos, de autorizar la creaci¨®n de una fuerza policial palestina, o incluso la de entablar un di¨¢logo con la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina. En la actualidad, y a pesar de las dificultades, hay un proceso de paz. El llamamiento a la destrucci¨®n de Israel ?es acaso un testimonio de un deseo verdadero de alcanzar la paz? Lo dudo. Sin embargo, varios periodistas entendidos opinan que ese comportamiento palestino tambi¨¦n es culpa de Israel.

El empe?o de algunos periodistas espa?oles en responsabilizar a Israel de cualquier cosa ha producido en las ¨²ltimas semanas algunos an¨¢lisis y noticias ciertamente sorprendentes. Todav¨ªa est¨¢ fresca en mi memoria la cr¨®nica de un conocido corresponsal espa?ol que citaba "medios comunitarios" que culpaban al Mosad del caso Lewinsky, ya que se trata de una joven jud¨ªa. El periodista ni siquiera se tom¨® la molestia de contrastar semejante disparate. En la misma p¨¢gina pod¨ªan leerse citas y declaraciones tomadas de la prensa ¨¢rabe oficial, y la verdad es que en este caso las diferencias entre Al Jedida y EL PA?S se volv¨ªan cada vez m¨¢s difusas. Pocos d¨ªas m¨¢s tarde, un conocido comentarista afirmaba en este mismo diario que Israel es el principal beneficiario de que el presidente americano est¨¦ ocupado con sus problemas legales. La mayor¨ªa de los peri¨®dicos y periodistas espa?oles que se oponen a una operaci¨®n americana contra Irak acusan con el mismo fervor a Israel de ser responsable de la falta de apoyo internacional a tal operaci¨®n. Y con el mismo fervor se quejan del trato indulgente que recibe Israel.

Es posible que en el futuro haya que estudiar una posible relaci¨®n entre una cobertura period¨ªstica obsesivamente antiisrael¨ª y el hecho de que los sondeos demuestren unas tendencias racistas, antigitanas y antisemitas entre los j¨®venes espa?oles. De la prensa espa?ola no cabe sino esperar una mayor responsabilidad y equilibrio en esta crisis y en futuros acontecimientos.

es embajador de Israel.