La pugna por el poder arruina la fusi¨®n de Glaxo y SmithKline
Los grupos farmace¨²ticos Glaxo WeIlcome y SmithKline Beecham (SKB) sufrieron ayer un fuerte retroceso en el mercado de valores, tras confirmarse la noche anterior el colapso de las negociaciones para su fusi¨®n, valorada en m¨¢s de 100.000 millones de libras (25,1 billones de pesetas). Las acciones de Glaxo Wellcome, l¨ªder brit¨¢nico del sector, alcanzaron un m¨ªnimo en la Bolsa de Londres de 15,90 libras (3.990 pesetas) durante la jornada de ayer, frente a las 19,40 libras (4.869 pesetas) del d¨ªa anterior.
El fracaso de la fusi¨®n empuj¨® las acciones de SKB a un m¨ªnimo de 7,05 libras (1.769 pesetas), el equivalente a 256 pesetas menos que la cotizaci¨®n alcanzada el lunes. El colapso de la negociaciones se atribuye a la falta de un acuerdo definitivo sobre el reparto de puestos en la junta directiva.Seg¨²n los planes anunciados el 30 de enero, Glaxo Wellcome hubiera controlado el 59,5% del nuevo gigante y tres de los principales puestos directivos. La noche del lunes, SKB culp¨® a su ex-socio de provocar la ruptura: "Glaxo no ha querido proceder seg¨²n las disposiciones acordadas", se?al¨® en su comunicado. Las dificultades, seg¨²n los portavoces de SKB, se deben a divergencias sobre la "aproximaci¨®n a la posible fusi¨®n y la filosof¨ªa empresarial".
Glaxo WeIlcome, por su parte, se limit¨® a confirmar la imposibilidad de alcanzar un acuerdo a pesar de los potenciales beneficios que hubiera aportado la fusi¨®n.
Para los analistas de la City, el centro financiero de Londres, el fracaso representa "un triunfo del ego de los directivos sobre el inter¨¦s de los accionistas". Los primeros obst¨¢culos a la operaci¨®n m¨¢s importante de la historia se dejaron ver la semana pasada, con la publicaci¨®n de los resultados financieros, anuales de ambos grupos. Glaxo Weilcome advirti¨® entonces que la alta cotizaci¨®n de la libra esterlina hab¨ªa reducido sus beneficios unos 280 millones de libras (70.280 millones de pesetas).
Combinar los recursos en investigaci¨®n y desarrollo de ambos grupos era el principal atractivo de la operaci¨®n. El nuevo gigante hubiera ocupado el puesto tercero en la clasificaci¨®n mundial de empresas, tras la estadounidense General Electric y la anglo-holandesa Shell, y controlado cerca del 8% del mercado total de f¨¢rmacos. A larga distancia quedar¨ªan sus inmediatos rivales en el sector, los estadounidenses de Merck y los suizos de Novartis.
S¨®lo los sindicatos celebraron ayer el fracaso de una fusi¨®n que, seg¨²n sus calculos, pon¨ªa en peligro unos 10.000 puestos de trabajo en el Reino Unido, sobre una plantilla conjunta de 100.000 empleados en todo el mundo.
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