El Betis se dio un ba?o de tranquilidad

El Betis necesitaba ganar casi por prescripci¨®n facultativa. La receta fue la correcta, aunque ten¨ªa algunas contraindicaciones: el Valladolid llegaba despu¨¦s de tres triunfos consecutivos y lo recib¨ªa un equipo en estado de catalepsia y confusi¨®n de ideas.Finidi no s¨®lo se convirti¨® ayer en el m¨¢ximo goleador del Betis al aprovechar de cabeza un servicio de Jaime. Fue quien condujo al equipo y compens¨® con sentido com¨²n las dudas de un comienzo renqueante. Por parte sobretodo de Alexis, que entregaba al rival casi todos sus balones.

Como ocurre cuando no hay bonanza, Luis Aragon¨¦s sacrific¨® a los jugadores de turno. Esta vez le toc¨® a Oli y Soloz¨¢bal ver el partido desde el banquillo. La gran novedad t¨¢ctica fue volver a las estrellas, a un tri¨¢ngulo formado por Finidi, Alfonso y Jarni, con la escolta m¨²ltiple, atosigante, estajanovista, de Ca?as, que vio premiado tanto esfuerzo firmando el primer gol de la noche en una jugada de Alfonso, c¨®mplice del gol con su derroche de ingenio en la jugada y de generosidad en el pase del gol.

El Valladolid limit¨® el peligro a un par de acciones de Benjam¨ªn y un cabezazo envenenado de Julio C¨¦sar tras un fallo en el saque de Toni Prats. El mi¨¦rcoles de ceniza le fue propicio al Betis, que se quit¨® m¨¢scaras de endeblez estrat¨¦gica. Jaime y Fernando eran los zancos del equipo, los que oxigenaban esa carreta desde la que Ca?as conduc¨ªa los corceles de Jarni, Finidi y Alfonso.

En la curva de esta jornada aplazada, el Betis vuelve a adelantar a Valencia y Espanyol y se coloca octavo en v¨ªspera de su visita a Santiago y la visita del Chelsea a su estadio. A diferencia de hace tres d¨ªas, los cambios fueron positivos.

Sal¨ªa Cu¨¦llar en la segunda parte, in¨¦dito desde 1997. Poco despu¨¦s lleg¨® el gol de Finidi y el propio Cu¨¦llar, en un c¨®rner casi ol¨ªmpico, puso el bal¨®n en la cabeza- de Alfonso para que ¨¦ste marcara el tercero, el que cerraba la noche y rompiera un maleficio personal.

El Valladolid apenas ofreci¨® resistencia. En parte, porque el Betis no le dej¨®. Luis Aragon¨¦s debe sacar provecho de esta innovaci¨®n estrat¨¦gica de disfrazar a los centrocampistas de laterales y rotar a las estrellas en la noria incansable de Ca?as.