El Tribunal de Cuentas ve errores en tres balances del Instituto Cervantes

El Tribunal de Cuentas, en su informe de fiscalizaci¨®n del Instituto Cervantes correspondiente a los ejercicios 1992, 1993 y 1994, ha detectado diversas "salvedades" que afectan "principalmente a la falta de registro contable de los activos e inmuebles que le fueron traspasados conforme a su Ley de creaci¨®n". En el informe, remitido ya al Congreso de los Diputados, se indica que las cuentas del Instituto en esos a?os reflejan "la imagen fiel de su situaci¨®n financiero patrimonial, de sus operaciones y de la liquidaci¨®n de sus presupuestos a excepci¨®n de dos salvedades: que el Instituto no tiene registrado en su contabilidad el valor de esos edificios, mobiliario y enseres recibidos al constituirse en Ente p¨²blico, y que los saldos de las cuentas del material inmovilizado se amortizaron mediante dotaciones anuales inferiores a las necesarias.El Tribunal advierte adem¨¢s que, como consecuencia de la falta de acuerdo entre el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura y el Instituto para repartir los gastos que originan las pruebas de obtenci¨®n del DELE (Diploma de Ense?anza del Espa?ol como Lengua Extranjera), se desconoce c¨®mo podr¨¢ recuperarse un importe deudor que ascend¨ªa en 1994 a 96,5 millones de pesetas. Por iguales circunstancias, no se puede determinar c¨®mo se liquidar¨¢ un importe acreedor de 64,3 millones.

En sus conclusiones, el Tribunal de Cuentas afirma que la mayor¨ªa de centros en el extranjero no tiene definido a¨²n su estatuto jur¨ªdico ante los pa¨ªses en los que operan, y recomienda al Cervantes que resuelva la titularidad jur¨ªdica de dos de los inmuebles traspasados (Nueva York y T¨¢nger) y que mejore el control de alumnos y matr¨ªculas.