Villanueva guarda silencio ante la Asamblea de Madrid para no declarar contra s¨ª mismo
El empresario de gasolineras mostr¨® as¨ª su "desprecio a los ciudadanos", seg¨²n el PP
Los m¨¢ximos responsables del grupo Villanueva, Francisco Javier Villanueva Aranguren y su hijo Francisco Javier Villanueva Bravo, se negaron ayer a responder una sola pregunta ante la comisi¨®n de la Asamblea de Madrid que investiga el presunto fraude de las gasolineras. Y lo h¨ªcieron ampar¨¢ndose en el art¨ªculo 24 de la Constituci¨®n, que consagra el derecho de los ciudadanos a no declarar contra s¨ª mismos y a no reconocerse culpables. De nada sirvieron los intentos de los diputados por convencerles de que se les ped¨ªa justamente lo contrario: una declaraci¨®n de inocencia un desmentido a los indicios que los se?alan como autores de una gigantesca estafa a los consumidores.
En efecto, el art¨ªculo 24 de la Constituci¨®n establece que "todos tienen derecho a no declarar contra s¨ª mismos, a no confesarse culpables y a la presunci¨®n de inocencia".Los Villanueva no se apartaron ni un mil¨ªmetro del gui¨®n que llevaban preparado a partir de ese precepto. El resultado de esta estrategia fue demoledor para su imagen: "Quien calla otorga", fue la conclusi¨®n de diputado socialista Jos¨¦ Antonio Ruiz-Castillo. "Quien no es capaz de defenderse es que tiene mucho que ocultar", sentenci¨® Julio Misiego, de IU.
La cortes¨ªa con que fueron recibidos en la Asamblea los m¨¢ximos responsables del primer grupo familiar de estaciones de servicio de Espa?a -con m¨¢s de 50 gasolineras y una facturaci¨®n superior a los 50.000 millones al a?o-, fue volvi¨¦ndose indignaci¨®n cuando qued¨® patente que su colaboraci¨®n iba a limitarse a la mera presencia f¨ªsica, a la que est¨¢n legalmente obligados.
Francisco Javier Villanueva Aranguren, el patriarca del grupo, intent¨® leer al inicio de la sesi¨®n una declaraci¨®n escrita, pero se le emplaz¨® a esperar turno y tuvo que escuchar la bater¨ªa de preguntas que le formularon los grupos parlamentarios. Muchas de ellas afectaban directamente a la manipulaci¨®n fraudulenta de los surtidores que investiga la justicia -para qu¨¦ serv¨ªa el dispositivo irregular descubierto, qui¨¦n y cu¨¢ndo lo instal¨®- pero otras se refer¨ªan a la estructura empresarial del grupo o a sus relaciones con el inspector de gasolineras de Madrid Segundo Sanz Ruiz-Castillo le invit¨® incluso a presentarse como v¨ªctima del esc¨¢ndalo, pregunt¨¢ndole si no se sent¨ªa "chivo explatorio y cabeza de turco" de una guerra comercial entre las grandes petroleras.
De nada sirvi¨®. Villanueva Aranguren se limit¨® a leer una declaraci¨®n en la que recordaba que el presunto fraude est¨¢ siendo investigado por el juzgado, ante el que ha comparecido como imputado; y que "por respeto" a la actuaci¨®n judicial, encontr¨¢ndose el caso sub i¨²dice, se acog¨ªa al art¨ªculo 24.
El portavoz socialista le record¨® que no se ha declarado el secreto sumarial y le inst¨® "a tranquilizar a los cientos de miles de conductores que repostan en sus estaciones de servic¨ªo". [No obstante, ¨¦stas no muestran ning¨²n distintivo de Villanueva, sino de grandes petroleras como Repsol].Misiego, de IU, consider¨® "reprobable" su silencio, que "pone en entredicho la honestidad del grupo Villanueva". Ferm¨ªn Lucas, del PP, interpret¨® su actitud como una muestra de "desprecio a los ciudadanos de Madrid", representados por la Asamblea Regional.
El ambiente se calde¨® a¨²n m¨¢s durante la comparecencia de V¨ªllanueva hijo, quien se limit¨® a leer con desgana el mismo texto que su padre. Los diputados, ya escaldados, sedieron cuenta de que la declaraci¨®n era respetuosa con el juez pero ignoraba ol¨ªmpicamente al parlamento. "Esta C¨¢mara se merec¨ªa una explicaci¨®n que ustedes nos han negado", afirm¨® Lucas. "Ustedes deben responder no s¨®lo ante el juez, sino tambi¨¦n ante los ciudadanos de Madrid, a los que nosotros representamos. Repudio, rechazo y repruebo su actitud chulesca", remach¨® RuizCastillo.
El presidente de la comisi¨®n tuvo que intervenir para recordar a los portavoces que los Villanueva estaban en su derecho de guardar silencio.
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