Clinton tuvo que o¨ªr un serm¨®n sobre el adulterio al partir de Sur¨¢frica

Bill Clinton pas¨® ayer las ¨²ltimas horas de su estancia de cuatro d¨ªas en Sur¨¢frica en una iglesia cat¨®lica, donde tuvo que atender estoicamente a un serm¨®n sobre el adulterio. De religi¨®n baptista, el presidente de EE UU lleg¨® con el gesto relajado y recibi¨® gratamente los saludos de un millar de surafricanos congregados ante la iglesia de Regina Mundi, en el barrio negro de Soweto. Estaba acompa?ado por Hillary Clinton. Los acordes de America the beautiful sonaban en el ¨®rgano de esta iglesia, que sirvi¨® de refugio a miles de negros durante los peores a?os del apartheid.

Pero se mostr¨® visiblemente inc¨®modo cuando el sacerdote, Mohlomi Malcobane, ley¨® el cap¨ªtulo 8, de san Juan. Se trataba de la par¨¢bola de la mujer ad¨²ltera salvada del apedreamiento por Jesucristo, quien desafi¨® a sus acusadores con tirar la primera piedra si estaban libres de pecado. "Debe haber muchos de entre nosotros que pueden sentirse indignos", dijo el sacerdote en el serm¨®n, despu¨¦s de la lectura b¨ªblica. "He aqu¨ª una mujer a la que la gente acusaba de adulterio, pero Jes¨²s dijo 'vete y no peques m¨¢s'. Muchas veces nos encontramos sorprendidos escondiendo a nuestro amor de los dem¨¢s, pero tenemos que saber que Dios es amor". Clinton se puso muy serio y visiblemente conmovido. Su esposa permaneci¨® todo el rato inclinada. Despu¨¦s comulg¨®, lo que fue posible gracias a una decisi¨®n tomada por la conferencia episcopal surafricana.Clinton, primer presidente de EE UU que visita Sur¨¢frica, afronta en su pa¨ªs una acusaci¨®n de acoso sexual y escandaloso testimonios sobre sus relaciones sexuales con algunas antiguas colaboradoras.

El sacerdote tambi¨¦n agradeci¨® a Clinton su acto de contrici¨®n p¨²blica respecto al "error" de la esclavitud y del fracaso de Estados Unidos a la hora de prevenir el genocidio en Ruanda en 1994. "Es para m¨ª un honor estar aqu¨ª, en este gran escenario de libertad", declar¨® Clinton al t¨¦rmino de la eucarist¨ªa. "Vine a Sur¨¢frica, primero para dar gracias a Dios por la libertad que ahora ten¨¦is. Y tambi¨¦n, decidido a trabajar con el pueblo de Sur¨¢frica para hacer lo m¨¢ximo posible por esa libertad".

La de ayer no fue la ¨²nica situaci¨®n inc¨®moda para Clinton en Sur¨¢frica. La semana pasada, el presidente Nelson Mandela alab¨® en p¨²blico a las bestias negras de la pol¨ªtica exterior de Washington como Libia, Cuba e Ir¨¢n. Esto fue precisamente objeto de ataque por las fuerzas conservadoras en Washington, que culparon a Clinton de no defender la pol¨ªtica exterior norteamericana.

"Yo siento pasi¨®n cuando explico al mundo nuestras posiciones. Son importantes para el futuro de la humanidad, porque van al n¨²cleo del concepto del imperio de la ley", declar¨® Newt Gingrich, presidente de la C¨¢mara de Representantes y una de las fuerzas m¨¢s vivas de los republicanos. "Si no podemos explicamos ante el mundo, ?c¨®mo va a aprender el mundo? Tengo el mayor respeto por Nelson Mandela, pero al mismo tiempo tienes que decir: 'Se?or presidente los cubanos que hoy est¨¢n encerrados merecen ser libres tanto como usted lo merec¨ªa. No vamos a tener tratos con nadie mientras d¨¦ cobijo a los terroristas y rechace entregarlos a un tribunal internacional", declar¨®, en referencia a los autores del atentado de Lockerbie (Escocia 1988), que supuestamente se en cuentran en Libia.

Clinton parti¨® despu¨¦s rumbo a Botsuana, siguiente escala de esta gira por seis pa¨ªses africanos. En Botsuana, donde se asienta la democracia m¨¢s estable del ?frica negra, los Clinton dispondr¨¢n de unos d¨ªas de descanso privado en el parque nacional de Chobe.

El presidente anunci¨® ayer su intenci¨®n de crear una cadena de radio para promover los valores democr¨¢ticos en ?frica que se llamar¨¢ Radio Democracia para ?frica. La nueva cadena formar¨¢ parte de la Voz de Am¨¦rica y tendr¨¢ una misi¨®n similar a la que tuvo Radio Europa Libre, "promover la democracia y los derechos humanos".