Holanda desarrolla un anticonceptivo que se implanta en el antebrazo y sirve para tres a?os

C¨®modo, fiable y duradero. As¨ª es el nuevo m¨¦todo anticonceptivo que ha desarrollado un laboratorio farmac¨¦utico holand¨¦s. Se trata de una peque?a barrita del tama?o de una cerilla que se implanta en el antebrazo, bajo la piel. Seg¨²n la empresa, ofrece un 100% de seguridad, apenas tiene efectos secundarios y surte efecto durante tres a?os. "Funciona de forma semejante a la p¨ªldora tradicional", explica Byron Oddens, portavoz del laboratorio.

El tubito, que se introduce con una especie de jeringuilla bajo anestesia local, contiene progesterona, la hormona responsable de la ovulaci¨®n, y la va liberando poco a poco. "Como la sustancia se env¨ªa directamente al cerebro a trav¨¦s del flujo sangu¨ªneo, se pueden utilizar cantidades m¨¢s peque?as y es menos perjudicial", asegura.La barrita tiene 14 cent¨ªmetros de largo por dos mil¨ªmetros de ancho y est¨¢ fabricada de un pl¨¢stico flexible que evita su ruptura. "A los tres a?os de estar implantada la c¨¢psula agota su contenido pero si la mujer cambia de opini¨®n antes, se puede extraer muy f¨¢cilmente", explica Oddens. La mujer recupera su fertilidad al mes siguiente.

Los investigadores del laboratorio, que han tardado m¨¢s de siete a?os en desarrollar el m¨¦todo, han realizado un amplio estudio internacional. M¨¢s de 2.500 mujeres en diversos pa¨ªses en Asia, Europa y Am¨¦rica se prestaron a que se les implantara la barrita, bautizada con el nombre de Implanon, y se les hiciera seguimientos mensuales. En cerca de 60.000 ciclos analizados no se registr¨®, seg¨²n la empresa, ni un solo embarazo.

El m¨¦todo, que se pondr¨¢ a la venta antes de fin de a?o en Holanda y en el resto de Europa a medida que las autoridades sanitarias lo aprueben, tiene un efecto secundario. "La c¨¢psula no contiene estr¨®genos, la otra hormona sint¨¦tica que tienen todas las p¨ªldoras anticonceptivas", dice Oddens. Cuando se produce de forma natural, es la encargada de regular los ciclos mensuales y responsable de que a su fin se produzca la hemorragia.

Efecto secundario

Administrada de forma sint¨¦tica, obliga a un descanso de siete d¨ªas al mes que evita las reglas irregulares y abundantes. Con Implanon bajo la piel, como no es posible detener la salida de las hormonas, al cabo de tres semanas se producen alteraciones en la menstruaci¨®n. Seg¨²n la investigaci¨®n, una de cada cinco mujeres deja de tener reglas a los pocos meses de usar el m¨¦todo y las cuatro restantes menstr¨²an de forma irregular y muy poco abundante. Unas consecuencias que seg¨²n Oddens no han preocupado a las pacientes."La mayor¨ªa de las mujeres no se han molestado por ese efecto secundario. Si est¨¢n seguras de que el m¨¦todo funciona, incluso para muchas es un gran alivio no tener hemorragias abundantes". Sobre la irre gularidad -las p¨¦rdidas se pueden producir en cualquier momento del ciclo-, Oddens asegura que la ¨²nica manera de minimizar las molestias es informar adecuadamente a las mujeres antes de proceder al implante.

La nueva p¨ªldora est¨¢ concebida para mujeres que tienen una vida laboral poco regular o con dificultades para tomar la pastilla a la misma hora. "Es un problema para las azafatas o para quienes viajan mucho cambiando continuamente de zonas horarias", asegura Oddens. El sistema costar¨¢ 250 florines (cerca de 18.000 pesetas) y en Holanda ser¨¢ pagado por la Seguridad Social, al igual que se hace ahora con el resto de los m¨¦todos anticonceptivos.

Antecedentes

A principios de los a?os ochenta, otra empresa holandesa empez¨® a utilizar un m¨¦todo semejante que no lleg¨® a hacerse popular entre las mujeres europeas pero que ha sido ampliamente utilizado como m¨¦todo de planificaci¨®n familiar en los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo.Norplant, que as¨ª se llamaba, no ofrec¨ªa tanta fiabilidad. Su colocaci¨®n era m¨¢s complicada porque constaba de cinco c¨¢psulas y ten¨ªa efectos secundarios como menstruaciones muy abundantes y fuertes dolores de cabeza. "Ahora se trabaja sobre una generaci¨®n de p¨ªldoras y hormonas sint¨¦ticas mucho m¨¢s avanzadas y menos perjudiciales", dice Oddens.