Escritura p¨²blica

El Ayuntamiento de Guadarrama, en pleno celebrado el d¨ªa 4 de abril de 1997, procedi¨® a adjudicar las parcelas 71, 72 y 73 del Pol¨ªgono Industrial La Mata a la empresa F¨¦lix Buquerin, SL.A ra¨ªz de dicha adjudicaci¨®n que se hizo previo expediente instruido al efecto, se elev¨® a escritura p¨²blica ante el notario de El Escorial y supongo que ya se habr¨¢ inscrito en el Registro de la Propiedad.

La empresa citada, al comenzar las obras de una nave, se encuentra que por su parcela discurre (dentro de su propiedad) un colector de saneamiento (m¨¢s adelante se descubrir¨ªan otros servicios), hecho que creaba una servidumbre no contemplada ni en el expediente que examinamos los concejales para la adjudicaci¨®n ni en la escritura de propiedad, de manera inexplicable, puesto que el Plan Parcial del Pol¨ªgono fue aprobado por el propio Ayuntamiento y los planos obran en el archivo municipal, de modo que no se trata de un error, sino de una negligencia inexcusable que podr¨ªa dar lugar una querella por estafa o falsedad en documento p¨²blico, si es que un fiscal o un juez examinan el caso previa demanda.

Este hecho se puso en conocimiento del Ayuntamiento mediante escrito de la empresa F¨¦lix Buquerin, SL, con fecha 3 de septiembre de 1997, informado por el top¨®grafo municipal el 16 del mismo mes (en el que se manifiesta la imposibilidad de retirar el colector por tratarse del emisario Cercedilla-Los Molinos-Guadarrama, ?casi nada!).

La propia Comisi¨®n de Gobierno, en sesi¨®n de 24 de octubre de 1997, acord¨® denegar la retirada de dicho colector, en base a la imposibilidad de realizarla, haciendo saber a la empresa F¨¦lix Buquerin, SL, que cualquier da?o o perjuicio que le produzca, el Ayuntamiento se har¨¢ cargo de su reparaci¨®n.

Como vemos, el propio Ayuntamiento reconoce la existencia de una servidumbre no comunicada al adjudicatario, constando en escritura p¨²blica como "libre de cargas", de modo que el propietario tiene en su mano un arma que puede utilizar en cualquier momento, puesto que el propio Ayuntamiento, en comisi¨®n de gobierno, le da una patente de corso para que, si tiene alg¨²n problema, lo paguen las arcas municipales, es decir, el colectivo de los vecinos.

Pero eso no es suficiente, porque la actuaci¨®n de la Administraci¨®n ha de sujetarse en todo momento a la legalidad, y no sirven los acuerdos chapuza, que podr¨ªan venirse abajo por una sentencia judicial. Por lo mismo, yo, como concejal en la oposici¨®n, vengo a hacer p¨²blico este desaguisado, que es tan s¨®lo una parte de la novela de la que existen muchos m¨¢s cap¨ªtulos. Concejal independiente.