La oposici¨®n de Nigeria convoca una jornada de protesta contra Abacha
El principal partido de la oposici¨®n democr¨¢tica nigeriana, Acci¨®n Unida para la Democracia, envalentonado por el ¨¦xito del boicoteo a las elecciones legislativas del s¨¢bado, convoc¨® ayer para el 1 de mayo una jornada nacional de protesta para exigir la dimisi¨®n del dictador, general Sani Abacha. Esta acci¨®n es el primer paso en una cadena de protestas, en las que se incluye la huelga general, con el fin de impedir que Abacha se convierta en presidente civil el 1 de agosto.
Las legislativas eran el primer paso del plan. La baj¨ªsima participaci¨®n ha dejado a Abacha y a su junta militar al descubierto. No hay datos oficiales, pero son varios los periodistas occidentales que recorrieron diversos colegios y hallaron que en los que estaban inscritas 500 personas no hab¨ªa m¨¢s de 30 papeletas a la hora del cierre de la votaci¨®n. Los expertos sit¨²an la abstenci¨®n real entre un 75% y un 90%. Incluso el actual n¨²mero dos del r¨¦gimen, el tambi¨¦n general Jeremiah Useni, gobernador de Abuja, ha reconocido el contratiempo: ?Estoy disgustado con la gente... Esperaba una gran participaci¨®n. No s¨¦ cu¨¢l es la raz¨®n de lo sucedido?. Una de las respuestas podr¨ªa ser la actitud de los partidos de la oposici¨®n, excluidos del juego pol¨ªtico, que pidieron el boicoteo. ?Nuestra pol¨ªtica va a seguir siendo la de desacreditar al r¨¦gimen?, asegur¨® ayer Olisa Agbakoga, l¨ªder de Acci¨®n Unida para la Democracia, principal impulsor de la jornada de protesta del 1 de mayo.
?La votaci¨®n ha sido un ejercicio de futilidad. Los candidatos vencedores hab¨ªan sido designados antes de las propias elecciones?, asegur¨® el hombre de negocios Tony Okereke, otra de las figuras opositoras. ?Entonces, para qu¨¦ votar?? Es la opini¨®n generalizada: las legislativas eran un proceso intrascendente. Fuentes diplom¨¢ticas occidentales en Lagos creen que la masiva abstenci¨®n tentr¨¢ consecuencias. ?Hay muchas preguntas que responder a cerca de c¨®mo se ha conducido este proceso?, dice el diplom¨¢tico.
Los datos del primer escrutinio oficial no ofrecen sorpresas. El Partido Unido del Congreso de Nigeria, el de los militares, ha tomado ventaja. Pero no hay cifras. Ni de participaci¨®n ni de votos.
Nigeria, con 104 millones de habitantes, es el pa¨ªs m¨¢s poblado de ?frica. Su riqueza petrolera no es suficiente para contrarrestar la incapacidad de su Gobierno militar y la corrupci¨®n. En Lagos, la capital, es frecuente la presencia de colas de varias horas para lograr unos pocos litros de gasolina. El pa¨ªs est¨¢ casi en bancarrota. A pesar de ello, Abacha, que se aup¨® en el poder mediante un golpe de Estado en 1993 para impedir la victoria electoral de Masud Abiola, pretende seguir en el cargo como civil. Las elecciones de agosto, en las que ¨¦l es el ¨²nico candidato, son su coartada. Aunque Abacha no ha anunciado a¨²n cu¨¢les son sus intenciones, los cinco partidos legalizados le apoyan como candidato. Ser¨¢ un mero plebiscito. Sin un rival en frente.
Fusilar a los traidores
Este martes, el r¨¦gimen se enfrenta a otro problema: la condena a muerte del ex general Oladipo Diya (ex mano derecha de Abacha) y de otros 25 altos cargos acusados de promover un golpe de Estado. Se enfrentan a un pelot¨®n de fusilamiento. Numerosas organizaciones de derechos humanos han reclamado que se les respete la vida. La oposici¨®n al r¨¦gimen militar se ha concentrado todos estos a?os en el suroeste, en la regi¨®n natal de Abiola (detendido en 1994 por declararse presidente). Esta oposici¨®n ha ido creciendo. Incluso los datos de participaci¨®n en las legislativas del s¨¢bado en el norte, tierra natal de Abacha, demuestran que triunf¨® el boicoteo.
El peri¨®dico de Abiola, el Concord , interpret¨® ayer la escasa presencia de votantes como un voto de no confianza en el r¨¦gimen. El precio de una larga protesta no asusta a los comerciantes y a la debilitada clase media: ya no tienen mucho que perder. Ya lo perdieron casi todo hace tiempo.
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