"El asesinato del obispo Gerardi es un aviso a la comisi¨®n de la verdad"
Thomas Buergenthal (Estados Unidos, 1934), uno de los "m¨¢s j¨®venes supervivientes de Auschwitz", es profesor de Derecho Internacional, expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, exmiembro de la Comisi¨®n de la Verdad en El Salvador y actualmente trabaja en la Comisi¨®n de Derechos Humanos de la ONU. En Bilbao para ofrecer una conferencia sobre su experiencia en El Salvador, se declara pesimista sobre el respeto a los derechos humanos a medio plazo. "El asesinato del obispo guatemalteco Jos¨¦ Juan Gerardi", afirma, "es un mensaje para la comisi¨®n de la verdad de Guatemala". Pregunta. ?Hasta qu¨¦ punto son ¨²tiles las comisiones de la verdad? Respuesta. Son muy ¨²tiles si tienen todo el poder para decir la verdad. Como sucede en Sur¨¢frica. No es posible la reconciliaci¨®n si no se explica el pasado y los actos de la gente. Eso es m¨¢s importante que las sanciones. P. En las comisiones latinoamericanas no se cumplen esas condiciones. R. Por eso en Argentina todav¨ªa hay problemas. Se ha amnistiado sin descubrir la verdad. La amnist¨ªa de un a?o para otro es casi una ratificaci¨®n de los actos anteriores. Esto no conduce a una reconciliaci¨®n. P. ?Es usted pesimista respecto a los efectos de las comisiones de la verdad en Guatemala, El Salvador, Chile o Argentina? R. Hay grandes diferencias. En El Salvador era una comisi¨®n internacional de la ONU. Estas tienen mucho m¨¢s credibilidad. En Guatemala es una mezcla. El presidente es un profesor alem¨¢n [que trabaja] con dos guatemaltecos. Lo importante es identificar a los culpables. P. Algo que no va suceder, con nombres y apellidos, en Guatemala. R. No hacerlo impide la reconciliaci¨®n. Es importante despu¨¦s de una guerra civil sangrante saber qui¨¦nes cometieron qu¨¦ en ambas partes. No soy optimista. P. ?C¨®mo interpreta el asesinato del obispo guatemalteco Jos¨¦ Juan Gerardi? R. Es un mensaje para la comisi¨®n de la ONU, que todav¨ªa no ha publicado su informe. P. ?Van a darse nombres? R. No lo s¨¦. En el mandato se habla de que no se puede identificar [a los autores de las violaciones]. Pero no s¨¦ c¨®mo lo va a interpretar la comisi¨®n. Es posible que pretendan se?alar [a los culpables] sin mencionar [directamente] a los comandantes de las tropas. Los asesinos han avisado a la comisi¨®n de que tenga cuidado. P. ?Qu¨¦ es mejor, renunciar a identificar a los criminales en aras de la tranquilidad o se?alar su identidad aunque se produzcan en breve brotes de violencia? R. La comisi¨®n va a indicar que la guerrilla guatemalteca es responsable de una u otra matanza y que los militares mataron a gente en determinadas zonas. Pero si el comandante de esa zona [en el momento de los cr¨ªmenes] vive bien en su casa y tiene un Mercedes no se va a solucionar nada. Ayuda un poco, pero no es la verdad. Para las v¨ªctimas nada habr¨¢ cambiado porque ya saben que fueron militares como el carnicero Efra¨ªn R¨ªos Montt, que luego entran en el Congreso. P. ?Sin castigo habr¨¢ paz? R. Se puede castigar sin encarcelar. Identificar a una persona como culpable ya es una sanci¨®n y es fundamental. Muchas veces se dice que si se se?ala a los culpables no va a haber reconciliaci¨®n. Yo pienso lo contrario. P. ?Le han echado en cara alguna vez que los pa¨ªses occidentales est¨¢n m¨¢s preocupados por sus intereses econ¨®micos que por los derechos humanos? R. Ning¨²n pa¨ªs tiene el monopolio sobre la verdad de la democracia. Suele ocurrir que los dictadores argumentan que deben luchar antes contra el hambre que por los derechos humanos. Es una excusa. Aunque todos tenemos culpa. En Bosnia ha muerto mucha gente por culpa de Occidente. Hemos permitido la limpieza ¨¦tnica. P. ?Conf¨ªa en que mejore la situaci¨®n de los derechos humanos a medio plazo en los pa¨ªses subdesarrollados? R. No a medio plazo. Lo ¨²nico que se puede hacer es presionar y presionar desde la ONU a otros pa¨ªses. Pero va a llevar mucho tiempo. Hay que tener paciencia. La educaci¨®n sobre los derechos humanos es crucial. Pero para ello debe haber democracia. Tambi¨¦n llevar¨¢ tiempo porque en Am¨¦rica Latina hay mucha corrupci¨®n. P. ?Los ind¨ªgenas est¨¢n m¨¢s informados de lo que parece? R. Viajaba junto al expresidente colombiano Belisario Betancur y el excanciller venezolano Renaldo Figueredo a un pueblecito de El Salvador para entrevistar a la gente. Un campesino nos dijo que se hab¨ªan violado sus derechos como en el caso Vel¨¢zquez Rodr¨ªguez, un asunto que juzgu¨¦ siendo juez de la Corte Interamericana en relaci¨®n con unas desapariciones en Honduras. No entiendo c¨®mo, pero ¨¦l lo conoc¨ªa. Betancur le dijo que yo hab¨ªa juzgado ese caso, pero al campesino no le import¨® nada. Reclam¨® su derecho. P. ?Conoce el Pa¨ªs Vasco? R. No. P. Hay una demanda de varios partidos para que se re¨²na a los presos de ETA en c¨¢rceles pr¨®ximas a Euskadi. ?Cree que no acercarlos viola los derechos humanos? R. Hay acuerdos internacionales para el intercambio de presos por esta misma raz¨®n. Pero imagino que es para que no puedan comunicarse y organizarse con sus partidarios. P. ?Justifica eso el alejamiento? R. No puedo meterme [en estos asuntos]. No los conozco.
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