Caballero: "No les llegamos a pedir que condenen los asesinatos, pero pidan que no maten, y ni eso hacen"

A Tom¨¢s Caballero no lo mataron ayer. S¨ª es verdad que ayer dej¨® de respirar, que un terrorista de ETA dispar¨® dos veces contra ¨¦l y lo abandon¨® agonizante sobre el volante de su coche, muy de ma?ana, despu¨¦s de desayunar. Pero el primer cap¨ªtulo de la muerte de Tom¨¢s Caballero se escribi¨® el pasado 9 de enero, en el mismo sal¨®n de plenos donde ayer, ya amortajado, recibi¨® el llanto de muchos, el respeto de todos.Ese d¨ªa, Caballero tom¨® la palabra para condenar el asesinato del concejal de Zarautz Jos¨¦ Ignacio Iruretagoyena. Mir¨® de frente a los tres representantes de Herri Batasuna en Pamplona y les dijo fuerte y claro: "Debemos plantar cara no s¨®lo a los asesinos, sino tambi¨¦n a quienes les jalean, les apoyan y nunca les condenan. Me estoy refiriendo a los miembros de HB". En tono emocionado agreg¨®: "No les llegamos a pedir que condenen los asesinatos, pero pidan que no maten, pidan que no maten; y ni eso hacen..."

Luego se acord¨® de sus 63 a?os, de la larga temporada vivida bajo el yugo de Franco, y a?adi¨®: "A los que tenemos una determinada edad, nos toc¨® luchar contra una dictadura y luchamos, salimos adelante. No nos van a amedrentar ahora con otra dictadura".

La querella de HB

HB intent¨® entonces que Caballero rectificara, que suavizara sus palabras, que se callara. Se querellaron contra ¨¦l por injurias y calumnias, le pidieron 90 millones de pesetas de indemnizaci¨®n. Un juez archiv¨® la denuncia tras o¨ªr al concejal de UPN. El diario Egin public¨® su fotograf¨ªa, el retrato del culpable, junto a un titular que dec¨ªa: "El archivo de la querella a Caballero legaliza la calumnia a HB". El acoso sigui¨® en la calle, pero Tom¨¢s Caballero prefiri¨® seguir viviendo como siempre, sin escolta. Cada ma?ana bajaba por la leche y el pan, desayunaba con su mujer y luego se iba al ayuntamiento. Se hab¨ªa acostumbrado, eso s¨ª, a mirar los bajos de su coche, que una cosa es despreciar al miedo y otra ser un temerario.Ayer lo volvi¨® a hacer, se agach¨® y mir¨®, no hab¨ªa nada. Pero la muerte le vino de frente. Se desboc¨® la pistola que un terrorista calent¨® durante cinco meses. Dos disparos y otra victoria de ETA. Una mujer sin marido. Cinco hijos sin padre. Ocho nietos sin abuelo. Ayer, mientras el cad¨¢ver de Tom¨¢s Caballero reposaba sobre la mesa de autopsia, sus compa?eros volvieron al sal¨®n de plenos y le recordaron.

El alcalde de Pamplona, Javier Chourraut, de Convergencia Democr¨¢tica de Navarra, hizo suyas las palabras de Caballero: "Se?ores de HB, perm¨ªtanme que les haga un ruego: si tienen alguna capacidad de influencia en quienes han asesinado o han ordenado el asesinato de Tom¨¢s, por favor, p¨ªdanles que dejen de asesinar".

Joaqu¨ªn Pascal, el portavoz del PSOE, fue muy duro: "HB apunta y ETA dispara. HB presenta una querella que en realidad es una diana y ETA acepta el gui?o e imparte su pretendida justicia".

Al final del pleno, cuando los c¨¢maras de televisi¨®n ya hab¨ªan apagado sus focos y la estancia se qued¨® casi sola, el concejal de HB Koldo Lakasta se acerc¨® a Jos¨¦ Javier Echeverr¨ªa, el portavoz de IU, y le susurr¨® unas palabras en voz baja, casi al o¨ªdo: "Ya le avisamos cuatro veces para que rectificara". No lo hizo. Hoy le dar¨¢n tierra.