Mortal radiomarcaje de osos

, Las conclusiones de la necropsia practicada al oso pardo que muri¨® d¨ªas despu¨¦s de que hubiese sido capturado en una trampa en el parque natural de Somiedo (Asturias) para instalarle un radiotransmisor ser¨¢n dadas a conocer esta semana. Hasta entonces, el Gobierno del Principado guardar¨¢ silencio y no har¨¢ declaraciones oficiales sobre el caso. Pero la oposici¨®n de izquierda en el Parlamento regional y grupos conservacionistas han reabierto la pol¨¦mica sobre la idoneidad de este m¨¦todo de seguimiento para el estudio y conservaci¨®n del oso pardo, una especie en peligro de extinci¨®n, por el riesgo que pudiera entra?ar para los ejemplares sometidos a marcaje.Con dos n¨²cleos de poblaci¨®n osera, incomunicados entre s¨ª por la autopista del Huerna, que atraviesa la cordillera Cant¨¢brica, Asturias acoge el m¨¢s importante reducto de osos pardos de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica: no m¨¢s all¨¢ de 70 ejemplares, sometidos, entre otros riesgos, al peligro de un retroceso gen¨¦tico a causa de factores de consanguinidad. La muerte de un solo ejemplar con capacidad para procrear constituye, por ello, un coste alt¨ªsimo en el empe?o por garantizar la continuidad de la especie en Espa?a.

La Administraci¨®n asturiana hab¨ªa venido desarrollando, bajo gesti¨®n socialista, un plan intensivo para la recuperaci¨®n de la poblaci¨®n osera consistente en la persecuci¨®n de la caza y el furtivismo, y en el desarrollo de un programa de estudio de la poblaci¨®n osera mediante el seguimiento, observaci¨®n y an¨¢lisis, a distancia, de los ejemplares. El actual Gobierno regional, del PP, decidi¨® dar un paso m¨¢s, y en noviembre emprendi¨®, en colaboraci¨®n con el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), la Universidad de Oviedo y el Servicio Vida Salvaje, de Estados Unidos, un plan para el marcaje y radioseguimiento de los plant¨ªgrados mediante la colocaci¨®n de transmisores adosados al animal con un collar¨ªn.

Desde que se puso en marcha este plan, hace seis meses, s¨®lo tres ejemplares (dos oseznos y un macho adulto) han sido marcados, y con resultado desigual: de uno de los oseznos no se ha vuelto a saber -se sospecha que el transmisor debi¨® desprenderse o deteriorarse-, y el oso adulto, de 170 kilos de peso, muri¨® el pasado d¨ªa 7, en circunstancias a¨²n por aclarar, al cabo de una semana de que se le hubiera instalado el radiotransmisor.

El animal fallecido hab¨ªa sido apresado el 30 de abril. Tras devolverle la libertad, estuvo activo, pero movi¨¦ndose ?sorprendentemente poco? entre los d¨ªas 1 y 4, seg¨²n sus seguidores. A partir del 4 de mayo, los emisores no detectan actividad del oso. Los bi¨®logos del programa acuden el d¨ªa 6 al lugar donde se halla el animal -a menos de un kil¨®metro de donde hab¨ªa sido marcado- y advierten que el oso est¨¢ en ?muy mal estado aparente? y con muestras inequ¨ªvocas de debilidad. Se le intenta reanimar, pero no se constata mejor¨ªa. El d¨ªa 7 se pone en marcha una operaci¨®n de salvamento: es evacuado en helic¨®ptero a la Facultad de Veterinaria de Le¨®n, pero fallece en el vuelo.

Las primeras hip¨®tesis apuntan como causa m¨¢s probable de la muerte una infecci¨®n aguda originada por una herida que presentaba en la pata delantera derecha, ocasionada, seg¨²n todos los indicios, por una trampa. Los bi¨®logos del Principado descartan, sin embargo, que esa herida se la produjera el cepo de acero utilizado en la campa?a de radiomarcaje: aseguran que este lazo retuvo al animal por su brazo izquierdo, por lo que la herida debi¨® de produc¨ªrsela otra trampa, acaso de furtivos.

El zo¨®logo Miguel Delibes, director cient¨ªfico del proyecto, asegura en un informe provisional que ?tanto la metodolog¨ªa como los sistemas de trabajo utilizados han sido correctos?. Pero el 25 de abril, cinco d¨ªas antes de ser apresado por el cepo del Principado, el oso hab¨ªa sido fotografiado por estudiosos del Fondo Asturiano para la Protecci¨®n de los Animales Salvajes (FAPAS), a 4,5 kil¨®metros de donde fuera capturado. Aseguran los responsables de FAPAS que caminaba a paso normal y no presentaba lesiones en la mano derecha.