Giulini: ?La m¨²sica es un acto de amor?
El director comparte sus experiencias con j¨®venes int¨¦rpretes
?Tuve profesores de composici¨®n excelentes, y al final de la carrera mis obras eran, t¨¦cnicamente, de muy buena calidad. Entonces me pregunt¨¦: "Si compones, ?tendr¨¢s algo que decir?". Pues no. As¨ª que prefer¨ª callarme?. Como director de orquesta, por el contrario, Carlo Maria Giulini, nacido en 1914 y ¨²ltima leyenda viva de su especialidad, ten¨ªa mucho que decir. Ayer, en la Residencia de Estudiantes, de Madrid, comparti¨® con su p¨²blico reflexiones sobre la m¨²sica, a la que define como ?un acto de amor?.
Despu¨¦s de una hora y media de conversaci¨®n, aficionados, mel¨®manos de todas edades y j¨®venes m¨²sicos, con los instrumentos en sus estuches, reservaron una gran ovaci¨®n a Carlo Maria Giulini, que contest¨® a las preguntas con su habitual sentido del humor y amabilidad. ?Yo nunca me hab¨ªa planteado ser director de orquesta?, afirm¨®. ?Pero siempre me fascinaron los gestos de director?.Desde hace medio siglo son esos gestos y sus manos, de una elegancia incomparable, los que fascinan al p¨²blico y a las orquestas. La ¨²ltima ha sido la Joven Orquesta Nacional de Espa?a (JONDE), que Giulini dirigi¨® el martes y mi¨¦rcoles en Valencia y Madrid.
Para Giulini, las dos cosas que dan fuerza a un ser humano son ?la fe y el amor?. ?La interpretaci¨®n?, a?adi¨®, ?siempre debe estar ?al servicio de la partitura y del compositor?. Es por esta raz¨®n por la que Giulini admir¨® tanto al m¨ªtico director de orquesta Arturo Toscanini, fallecido en 1957, y al que calific¨® ayer de ?¨²nico gran int¨¦rprete del siglo?. ?Antes de ¨¦l los m¨²sicos de orquesta consideraban que la partitura era la base de sus propias fantas¨ªas. Toscanini ha sido el primero que hizo respetar el texto?.
La relaci¨®n de amor que tiene Giulini con la m¨²sica tambi¨¦n la tiene con los compositores. ?S¨®lo toco a los que me gustan y a los que quiero?. ?Los otros? Se limita a respetarlos, como a Puccini, por quien el director italiano nunca ha mostrado mucha afici¨®n: ?Es un compositor que nunca ha formado parte de mi vida?. Giulini tampoco se priv¨® de apuntar lo que pensaba de Stravinski como director de orquesta: ??Quer¨¦is dejar de apreciar la m¨²sica de Stravinski??, dijo al p¨²blico. ?Pues eschuchadla dirigida por su autor...?
Maria Callas
Desde hace unos a?os, el director ha abandonado la ¨®pera, dedic¨¢ndose s¨®lo al repertorio sinf¨®nico. ?La ¨®pera re¨²ne muchos elementos: m¨²sicos, cantantes, director de orquesta y director esc¨¦nico?, explic¨®. ?Para que sea un ¨¦xito, yo creo que todos deben tener s¨®lo un objetivo: servir a la obra. Es muy dif¨ªcil conseguirlo?.El nombre de Maria Callas, con quien Giulini trabaj¨® tanto, surgi¨® varias veces durante la conversaci¨®n. Cont¨® la sorpresa que le caus¨® la cantante al principio de su carrera, cuando decidi¨® adelgazar. ?La hab¨ªa visto por ¨²ltima vez despu¨¦s de una Traviata, y la verdad es que estaba tan gorda que hab¨ªa que tener mucha imaginaci¨®n para ver a Violetta Valery muri¨¦ndose de tisis... Un a?o despu¨¦s, me cruz¨¦ con una mujer elegante, hermosa y delgada que me salud¨®. "?No me reconoce?", me pregunt¨®. "Soy Maria Callas?. Giulini record¨® el ?extraordinario trabajo dram¨¢tico? de la cantante y cit¨® como ejemplo su profesionalidad cuando trabaj¨® a solas con Luchino Visconti durante 20 d¨ªas -antes de los ensayos con el resto del equipo- para entrar en el papel de La Traviata. Giulini confes¨® que la Callas formaba parte, con el pianista Arturo Benedetti Michelangelo, de esas personas cuyo talento es ?un misterio?.
Babelia
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