El coordinador
F¨¦lix Manuel P¨¦rez Miyares estrena esta semana cargo. Coordinador de coordinadores. En un momento en el que la gesti¨®n del Estado tiende a descentralizarse y a aligerar su peso en la periferia, en nuestra comunidad, una vez m¨¢s, Madrid da la nota. No sirve ya el efectivo y siempre certero delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa, Jos¨¦ Torres Hurtado. Sus tareas son tantas que le impiden asumir nuevas misiones. Tampoco basta el subdelegado del Gobierno central, Andr¨¦s Herranz. Su fama de buen gestor no ha servido. Tiene que venir alguien para poner orden y concierto en las tareas de retirada de lodos, y qui¨¦n mejor que Miyares, hombre locuaz donde los haya. Despu¨¦s de las amplias reformas que hizo en la sede del Ministerio de Trabajo, del que fue titular, transit¨® por el centrismo y m¨¢s tarde por un andalucismo tibio, de escaso recorrido en Huelva. Ahora, sin embargo, con su viejo compa?ero de viaje, Javier Arenas, encuentra la senda correcta, que qui¨¦n sabe d¨®nde acabar¨¢. El af¨¢n de nombrar cargos fuerza la realidad. Hasta el punto de inventar uno para P¨¦rez Miyares mientras que, en CC OO de Sevilla, esta pr¨¢ctica, la de designar representantes, le ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza. Hoy CC OO de Andaluc¨ªa decide qu¨¦ hacer con los d¨ªscolos sevillanos, empe?ados en mantener en pie la figura de Antonio Rodrigo Torrijos con su nombramiento como integrante del Consejo Econ¨®mico y Social de la capital hispalense, a pesar de su expulsi¨®n, en toda regla, del sindicato. Un casus belli que ha de resolver con energ¨ªa el secretario general, Julio Ruiz. En el PSOE se ver¨¢n las caras con los del PDNI. Pero ?qu¨¦ puede salir de este encuentro? Poco, salvo los juegos floreados de unos y otros. Una faena de ali?o y un "despu¨¦s de las elecciones nos vemos" pueden resolver una cita que inquieta, en especial, a IU, obsesionada en alcanzar al menos la alcald¨ªa de C¨®rdoba, si hace falta con la ayuda de los socialistas. "Contramedicamentazo" Adem¨¢s, el Consejo de Gobierno est¨¢ dispuesto a dar el visto bueno al contramedicamentazo, esto es, el regate de ¨²ltima hora que hizo la Junta desmarc¨¢ndose de los recortes de la Administraci¨®n central. Un claro ejemplo del arrojo pol¨ªtico del consejero de Salud, Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Arboleya, en cuyo rostro se adivina la dificultad que le ha supuesto sacar adelante este estrat¨¦gico asunto para los socialistas andaluces. La Junta quiere amarrar hasta el ¨²ltimo detalle esta iniciativa, por lo que hoy se ver¨¢ el consejero con las organizaciones de consumidores y usuarios. Asistiremos, igualmente, en estos d¨ªas, a la apertura de un nuevo frente conflictivo en Andaluc¨ªa. Los alcaldes no quieren que se deje al margen a sus ayuntamientos en el desarrollo y aplicaci¨®n de la Aepsa, el nuevo PER. As¨ª lo plantean ya algunos ediles, que observan estas intenciones en la actitud de la Administraci¨®n central. Una posici¨®n cr¨ªtica municipal que incluso puede pillar a contrapi¨¦ a las propias organizaciones sindicales, proclives al consenso y al acuerdo con el Ministerio de Trabajo. Y a todo esto, queda por ver si por fin Aznar va a acceder o no a recibir a Chaves. Una entrevista que bien podr¨ªa servir para rebajar el nivel de enfrentamiento existente entre ambas administraciones y que en estos d¨ªas puede alcanzar cotas a¨²n m¨¢s importantes. Mientras tanto, el presidente andaluz, a lo largo de estas jornadas, a buen seguro que se tendr¨¢ que poner en m¨¢s de una ocasi¨®n el casco azul de la ONU para que las elecciones primarias en su partido no se conviertan en una pelea de corral entre candidatos, como ya se apunta en algunos sitios.
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