La instrucci¨®n de Garz¨®n estuvo bajo sospecha de parcialidad, dice Belloch

Juan Alberto Belloch, ex ministro de Justicia e Interior y portavoz de Justicia del Grupo Socialista en el Congreso, asegur¨® ayer que el juez Garz¨®n debi¨® haberse abstenido por iniciativa propia de hacer la instrucci¨®n del caso Marey por las sospechas de falta de imparcialidad que ha provocado debido a su paso anterior por el Ministerio del Interior como secretario de Estado del Plan Nacional sobre Drogas. Belloch sostiene que el juez de la Audiencia Nacional "ha generado una instrucci¨®n en la que las sospechas de no imparcialidad se han mantenido durante demasiados a?os".

Belloch confes¨® que cuando ¨¦l era ministro del Interior, Garz¨®n le pidi¨® "expresamente" que le nombrara secretario de Estado de Interior, a lo que se neg¨® argumentando que para ese puesto iba a nombrar a Margarita Robles. "Estoy convencido de que el paso del tiempo ha puesto en evidencia que hubiera sido realmente terrible que una personalidad del tipo de Garz¨®n hubiera ocupado ese puesto". Las aspiraciones del juez, a?adi¨®, eran m¨¢s altas ya que pretend¨ªa ser nombrado ministro de Justicia, aunque esto no se lo pidi¨® a Belloch porque correspond¨ªa hablarlo con el presidente del Ejecutivo. Seg¨²n ¨¦l, el problema que se plantea ahora es "hasta qu¨¦ punto personas que han tenido funciones de esa naturaleza pueden dar imagen de imparcialidad".Belloch indic¨® que afortunadamente ese asunto tiene actualmente una importancia menor, ya que el caso est¨¢ ahora en manos del Tribunal Supremo, pero subray¨®: "Durante demasiado tiempo ha estado sometido el prestigio de la Justicia a unas sospechas de parcialidad que han determinado cosas concretas, como ha sido el cambio de la ley, precisamente para que nunca m¨¢s sea posible una instrucci¨®n como la que hizo Garz¨®n.

El juicio del caso Marey desencaden¨® ayer m¨¢s comentarios en el ¨¢mbito pol¨ªtico. El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves, en declaraciones recogidas por Europa Press, asegur¨® que en todo este asunto ha habido "un ajuste pol¨ªtico de cuentas" desde antes de que el proceso llegase al Supremo. Se ha intentado "desacreditar, deslegitimar o borrar un per¨ªodo de la reciente historia de Espa?a, el que va desde 1982 a 1996, desde determinados medios de comunicaci¨®n, algunas instancias judiciales y tambi¨¦n desde el PP cuando estaba en la oposici¨®n y tambi¨¦n ahora en el Gobierno.

Un peri¨®dico y un juez

En la misma l¨ªnea, Alfonso Guerra dijo que est¨¢ demostrada "la intervenci¨®n extrajudicial de un determinado peri¨®dico en combinaci¨®n con un juez y luego de un partido pol¨ªtico, que es el PP". Jos¨¦ Bono, presidente de Castilla-La Mancha, reiter¨® que cree en la inocencia de Barrionuevo y apunt¨® que "cuando gobernaba Fraga, Ib¨¢?ez Freire y Mart¨ªn Villa tambi¨¦n hubo muertes y yo creo en su inocencia".Tambi¨¦n entr¨® ayer en pol¨¦mica I?aki Anasagasti, portavoz del PNV en el Congreso, quien dijo que las conversaciones de Argel fueron de ETA y el GAL y que Felipe Gonz¨¢lez tiene responsabilidad por omisi¨®n. Juan Manuel Eguiagaray le respondi¨® que "la capacidad de injuriar de Anasagasti ha traspasado ya todos los l¨ªmites".