Los conservadores de Ir¨¢n extienden su ofensiva contra el presidente Jatam¨ª

El ala m¨¢s conservadora del r¨¦gimen iran¨ª ha abierto otro frente en su operaci¨®n de acoso al presidente Mohamed Jatam¨ª. Una treintena de parlamentarios presentaron ayer una moci¨®n de censura contra el ministro del Interior, Abdul¨¢ Nuri, uno de los tres hombres clave del Gobierno aperturista de Jatam¨ª. Molestos por su apoyo abierto al procesado alcalde de Teher¨¢n, Golamhusein Karbach¨ª, los duros reprochan a Nuri las ¨²ltimas manifestaciones y le acusan de ?la inseguridad general? del pa¨ªs.

La interpelaci¨®n parlamentaria atribuye a Nuri la responsabilidad de los ¨²ltimos enfrentamientos entre militantes integristas y partidarios de Jatam¨ª por haber autorizado manifestaciones de estudiantes en Teher¨¢n, Nayafabad e Isfah¨¢n. Tambi¨¦n le acusan de haber dado el visto bueno a un acto en memoria de Mehdi Bazarg¨¢n (primer ministro en el Gobierno provisional tras la revoluci¨®n de 1979) en el que se corearon frases contra los conservadores del r¨¦gimen. Los inmovilistas se quejan asimismo de que ha cambiado a un elevado n¨²mero de antiguos responsables de Interior y de que hace ?declaraciones provocadoras? a la prensa.La reacci¨®n de Jatam¨ª no se hizo esperar. De inmediato manifest¨® que ?respaldaba? plenamente a su ministro, el hombre encargado de poner en pr¨¢ctica sus reformas sociales. Aun as¨ª, Nuri deber¨¢ pasar el trago de comparecer ante el Parlamento para responder a las acusaciones y volver a solicitar el voto de confianza de la C¨¢mara (mayoritariamente conservadora). De acuerdo con la Constituci¨®n iran¨ª, el interpelado dispone de 10 d¨ªas para presentarse. A pesar de los recelos que suscitaba su procedencia, el titular de Interior logr¨® el respaldo de 153 de los 266 diputados presentes en la votaci¨®n del Gabinete el pasado agosto.

Ahora la situaci¨®n puede ser m¨¢s dif¨ªcil. Por un lado, Al¨ª Akbar Nateq-Nuri, el l¨ªder de los conservadores que perdi¨® las elecciones frente a Jatam¨ª, acaba de ser reelegido presidente del Parlamento por tercer a?o consecutivo, con lo que se ha reforzado su posici¨®n. Por otro, la creciente tensi¨®n entre los grupos sociales que apoyan a uno y a otro sector del r¨¦gimen -a la que no es ajeno el actual juicio por corrupci¨®n al alcalde de Teher¨¢n, que hoy se reanuda- ha podido hacer mella en algunos diputados que temen lo que empiezan a percibir como excesos de liberalismo del r¨¦gimen. Para irritaci¨®n de los inmovilistas, Nuri en todo momento ha respaldado al popular alcalde Golamhusein Karbach¨ª, uno de los pilares de la elecci¨®n de Jatam¨ª.

No es la primera vez que Nuri es objetivo de los conservadores. En 1993 tuvo que abandonar el mismo despacho que hoy ocupa a consecuencia de una ofensiva que tambi¨¦n alcanz¨® a Jatam¨ª, a la saz¨®n ministro de Cultura. Ambos hab¨ªan sido nombrados para el cargo por el pragm¨¢tico Al¨ª Akbar Hachem¨ª Rafsanyani, al que Jatam¨ª sucedi¨® el a?o pasado con un masivo respaldo popular.

(La justicia iran¨ª orden¨® ayer la ?suspensi¨®n? del diario moderado Jam¨¦ (Sociedad), que apoya al presidente Jatam¨ª, y su director, Hamid Reza Jalai, fue inhabilitado por un a?o para ejercer el cargo, seg¨²n inform¨® la agencia oficial IRNA, citada por France Presse).