Sevilla con campanas, Granada sin toldos
Los seises bailaron ayer de nuevo en Sevilla para celebrar el Corpus Christi. Un sol espl¨¦ndido acompa?¨® a los miles de sevillanos que salieron en procesi¨®n por las calles alfombradas de romero que, junto al incienso, convirtieron la plaza de la Virgen de los Reyes en un rebujito de aromas y repique de campanas. Sonaban desde la Giralda con voz nueva tras su reciente restauraci¨®n. Una hilera interminable de hombres y ni?os vestidos de traje oscuro con un cirio en la mano, precedieron los desfiles militares, el coro de mujeres y la llegada de la Custodia junto a las autoridades de la ciudad. Todos desaparecieron con paso arm¨®nico a la entrada de la catedral. En Granada, donde el Corpus tambi¨¦n es fiesta grande, el sol luci¨® pero sin toldos. La llegada a la catedral de la procesi¨®n, precedida por los gigantes, cabezudos y la Tarasca, se ha visto envuelta este a?o en la pol¨¦mica. La reticencia del Ayuntamiento a colocar los toldos a lo largo del recorrido ha originado las protestas de la asociaci¨®n que en 1995 los entregara con idea de recuperar una costumbre que se remonta a comienzos del siglo XVI. Granada Hist¨®rica y Cultural ha anunciado su disposici¨®n a iniciar un proceso para revocar la donaci¨®n que hiciera hace tres a?os. Los toldos fueron colocados en 1995 por el Ayuntamiento socialista, y abandonados luego a su suerte. Los vecinos los recuperaron de las calles. "Este a?o", se?ala la asociaci¨®n, "han desaparecido totalmente ante lo que mostramos nuestra m¨¢s profunda indignaci¨®n por el mal trato dispensado al patrimonio cultural de la ciudad y el menosprecio mostrado hacia esa donaci¨®n".
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