Perdi¨® Inglaterra
EN T?RMINOS estrictamente deportivos, Inglaterra gan¨® ayer por 2-0 a T¨²nez. En t¨¦rminos sociales, perdi¨® muchos puntos frente al mundo entero a causa del gamberrismo racista de centenares de hinchas ingleses exaltados y borrachos que atacaron a seguidores de la selecci¨®n tunecina y a otros magreb¨ªes en una ciudad tan cargada de tensiones xen¨®fobas y anti¨¢rabes como Marsella. Los hooligans no son nada nuevo. Las ciudades europeas, incluidas las brit¨¢nicas, han sufrido durante muchos a?os sus excesos, con muertos dentro de los estadios, como en Heysel (Bruselas) en 1985 o en Hillsborough (Sheffield) en 1992, y violencia destructiva fuera de ellos. Sorprende que, con tan dolorosa experiencia, ni los organizadores del Mundial de f¨²tbol ni la polic¨ªa francesa ni la brit¨¢nica fueran capaces de sujetar a esta hinchada empapada en alcohol.Son m¨¢s que gamberros los que se lanzaron el domingo a quemar banderas tunecinas y que ayer siguieron incitando al enfrentamiento. Detr¨¢s de esta tendencia a la violencia se esconde una ideolog¨ªa de extrema derecha. Ayer, en Cardiff, cita del Consejo Europeo, el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, tuvo que pedir disculpas p¨²blicas por estos actos de gamberrismo, que no se pueden atribuir simplemente al paro, aunque echen sus ra¨ªces en las condiciones sociales de uno de los pa¨ªses con mayores desigualdades y en una cultura del hooliganismo, que tambi¨¦n es brit¨¢nica.
Aunque casi todos los pa¨ªses tienen un cierto n¨²mero de gamberros organizados en torno al f¨²tbol, los hooligans del Reino Unido llevan 20 a?os sembrando el p¨¢nico por donde pasan. La polic¨ªa, brit¨¢nica y francesa, deber¨ªa haber reforzado el seguimiento y control a los que habitualmente est¨¢n sometidos. En algunas ¨¦pocas y casos se les ha impedido salir de su pa¨ªs. Estos gamberros, y especialmente sus cabecillas, no son merecedores de la libertad de movimientos que les proporciona una Europa que debe sonrojarse por lo ocurrido en Marsella. Un bochorno que no debe repetirse.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.