Investigadores de la UCA logran un herbicida natural que garantizar¨¢ la rotaci¨®n de los cultivos

El efecto devastador que las malas hierbas y los matorrales producen en las cosechas se super¨® con la creaci¨®n de los herbicidas. La composici¨®n qu¨ªmica de los pesticidas aniquila las plantas perjudiciales para el cultivo, pero produce efectos medioambintales, algunas veces, terribles, como las mortandades de peces ocurridas hace tan s¨®lo unas semanas en el r¨ªo Barbate. Esta cortapisa al progreso y a la evoluci¨®n de la rentabilidad del campo puede tener su ep¨ªlogo en breve gracias a la labor investigadora de un grupo de 12 doctores y profesores qu¨ªmicos, bi¨®logos y farmac¨®logos de la Universidad de C¨¢diz (UCA). Desde el a?o 85 perseveran en la consecuci¨®n del primer herbicida natural que posibilite el cultivo rotativo y anule las terribles consecuencias ambientales. Ya lo tienen. "Avance mundial" "Estamos convencidos de que la nueva generaci¨®n de compuestos sustituir¨¢ a los qu¨ªmicos, lo que nos sit¨²a al frente de un avance de talla mundial", asegura Francisco Antonio Mac¨ªas, director del Departamento de Qu¨ªmica Org¨¢nica y del grupo de Alelopat¨ªa, ciencia que estudia la comunicaci¨®n y relaci¨®n interactiva entre las plantas. Estos estudios han dado como resultado el descubrimiento de dos familias de sustancias naturales: los Helianuoles, con 14 variaciones, y la Heliespirona, con 5 variantes. Sus denominaciones cient¨ªficas, con todo, contrastan con la cercan¨ªa y cotidianidad de su origen. "La f¨®rmula m¨¢gica est¨¢ en la hoja del girasol de donde hemos extra¨ªdo un compuesto que domina a la mala hierva hasta su total eliminaci¨®n", reza orgulloso Mac¨ªas, sabedor de que la labor investigadora de la UCA ha vuelto a ponerse al servicio del desarrollo de la sociedad. En esta ocasi¨®n, adem¨¢s, se ha conseguido un valor a?adido al responder a una importante demanda del mundo rural, seg¨²n Mac¨ªas, "tan expectante de nuevas directrices de progreso". Los productos qu¨ªmicos de s¨ªntesis y la f¨¢brica de mol¨¦culas de dise?o pueden, por tanto, pasar a la historia. En el mercado de los pesticidas, el 90% de las ventas corresponde a los herbicidas, una gran fuente de ingresos. Por lo tanto un avance de este calibre suscita la atenci¨®n y la curiosidad de los cultivadores porque puede generar importantes beneficios. Seg¨²n los c¨¢lculos aportados por Mac¨ªas, "la introducci¨®n de un herbicida nuevo en el mercado supondr¨ªa 11.000 millones de pesetas de beneficio al a?o". Hay ya dos grandes empresas internacionales que han obtenido el benepl¨¢cito del grupo de investigaci¨®n para que realicen experimentos por su cuenta y riesgo, aunque tendr¨¢n que pugnar por la comercializaci¨®n de un producto sobre el que la UCA se ver¨¢ obligado a negociar su patente mundial en pr¨®ximas fechas. Muchas son las ventajas que ofrecen los herbicidas naturales: adem¨¢s de permitir la elecci¨®n de cualquier cultivo, es sensiblemente m¨¢s barato al tiempo que, sobre todo, sus efectos desaparecen con el paso del tiempo y la intemperie, por lo que el agricultor podr¨¢ plantar, por ejemplo, un a?o ma¨ªz, otro trigo y el siguiente remolacha, mientras que, hasta ahora, si en un campo se cultivaba una cosecha deb¨ªa repetirse al a?o siguiente, seg¨²n explic¨® este investigador, que compagina su labor en los laboratorios con las clases diarias a sus alumnos en la Facultad de Qu¨ªmica. La teor¨ªa no ha podido obtener mejores resultados tras su aplicaci¨®n pr¨¢ctica. Los experimentos, primero en los laboratorios y luego en los invernaderos, han sido un ¨¦xito. El producto est¨¢ ahora pendiente de su aplicaci¨®n en el Rancho de la Merced, convertido en el Centro de Investigaci¨®n Agraria de la Junta, dentro del t¨¦rmino municipal de Trebujena (C¨¢diz). Las expectativas no pueden ser mejores. Como si de una batalla entre dos enemigos se tratase, el herbicida natural aniquila a la semilla de las malas hierbas, que degeneran o sufren un nacimiento raqu¨ªtico. La id¨¦ntica reacci¨®n experiment¨® la peque?a planta del invernadero. "Falta conocer su desarrollo en el medio natural, aunque los precedentes y los indicios no dejan lugar a dudas sobre ello", destaca Mac¨ªas. Los an¨¢lisis efectuados indican que las aplicaciones de los nuevos descubrimientos no se limitan s¨®lo al campo de la agricultura. Las familias de sustancias sacadas de la hoja del girasol, hasta ahora sin ninguna utilidad conocida, ofertan cualidades que combaten diversas bacterias o micororganismos que causan enfermedades. "Los estudios que hemos venido realizando nos sit¨²an en la pista y la casi certeza de que estos productos pueden estar ligados a la aplicaci¨®n farmacol¨®gica futura", explica Macias. "Esta idea", a?ade el director del proyecto, "nos hace vislumbrar que esto no es sino la punta del iceberg que no sabemos hasta donde puede extender sus ra¨ªces". "Pararse ahora ser¨ªa un craso error", afirma Mac¨ªas, quien conf¨ªa en que el grupo de Alelopat¨ªa de C¨¢diz descubra nuevas familias de estos compuestos.