M¨¢s nivel con los mejores

Ineficaz, no viejo. Un estilo no se valora por vigente o caduco, por viejo o moderno, sino por eficaz o ineficaz. Y el de Colombia evidentemente no logra los objetivos que se marca. La suya es una situaci¨®n muy dif¨ªcil de cara al futuro. Sustituir el estilo futbol¨ªstico de un pa¨ªs no es sencillo. No parece ofrecer int¨¦rpretes que con la misma idea obtengan algo mejor. Habr¨¢ que hacerse de paciencia, aceptar la realidad y esperar nuevas generaciones.Toques vac¨ªos. Interminable cantidad de toques sin ganar un solo metro ni eliminar adversario alguno. Colombia evita que el rival tenga la pelota por una posesi¨®n prolongada pero inofensiva. Se deleita con el contacto con el bal¨®n, no con la consecuencia que genera la acci¨®n. Sus recorridos siempre son transversales. Nadie recibe la pelota en un lugar donde el rival se vea sorprendido. No profundiza por los costados (laterales intrascendentes ofensivamente) y los delanteros recepcionan siempre de espaldas, nunca consiguen correr hacia delante. Daba la sensaci¨®n de que ni con la complicidad de un error ingl¨¦s, Colombia era capaz de generar una opci¨®n de gol.

Mejoras progresivas. Hoddle ha conseguido finalmente que en su equipo coincidan los mejores jugadores con una producci¨®n colectiva notable. Beckham, Owen y a lo mejor Mc Manaman, que en el peor de los casos quedar¨¢ como un excelente recambio, enriquecieron el rendimiento global. Inglaterra, con los mejores futbolistas dentro del campo, se mantuvo equilibrada. Tuvo un funcionamiento defensivo impecable. Los partidos anteriores fueron presentando problemas que el t¨¦cnico ha sabido resolver.

Mondrag¨®n, espl¨¦ndido. El resultado no refleja la diferencia que existi¨® entre los dos equipos. Hay un responsable casi exclusivo de esto: Mondrag¨®n, el consistente guardameta de Colombia.

Inofensivo. Colombia muestra una asombrosa falta de agresividad en ataque. Qued¨® reflejado en el inicio del segundo tiempo: pese a presentar seis futbolistas ofensivos -los delanteros Aristiz¨¢bal, Ricar y Valencia, el media punta Valderrama, y los volantes Rinc¨®n y Lozano-, Inglaterra le cre¨® cinco situaciones de gol clar¨ªsimas en ocho minutos, y Colombia ni se acerc¨® al ¨¢rea contraria. Es decir, los intentos no s¨®lo no consiguieron la pretensi¨®n, sino que comprometieron al equipo por detr¨¢s. La presencia exagerada de atacantes no garantiza llegada.

En busca de vuelo. Su actuaci¨®n sit¨²a a Inglaterra por encima del nivel que ven¨ªa mostrando hasta ahora y le aproxima al que se le atribu¨ªa antes de empezar el Mundial. El pr¨®ximo paso del equipo es lograr vuelo futbol¨ªstico. Ya no se trata s¨®lo de jugar bien o mejor, sino de acercar el rendimiento colectivo a la mejor versi¨®n de la que son capaces.