Decisivo en Argentina, inservible en el Valencia

Las misteriosas razones del f¨²tbol han obligado a cambiar los papeles de Ariel Burrito Ortega y Claudio Piojo L¨®pez, jugadores del Valencia y de la selecci¨®n argentina. Por cada partido del Mundial, la cotizaci¨®n de Ortega aumenta en el mercado. Se dice que el Manchester est¨¢ dispuesto a ofrecer 3.000 millones de pesetas por su fichaje. Mientras tanto, la cotizaci¨®n de L¨®pez ha bajado considerablemente durante la Copa del Mundo. Su incidencia en el juego de Argentina ha sido m¨ªnima.Pocos equipos sufren un dependencia tan grande hacia un jugador como Argentina con Ortega. Si la jugada no desemboca en ¨¦l, las posibilidades de organizar algo interesante son casi nulas. En un equipo ardoroso, pero limitado de talento, Ortega es la ¨²nica garant¨ªa de sorpresa. Aunque son evidentes sus problemas para terminar con precisi¨®n sus barrocas intervenciones, Ortega es lo m¨¢s parecido a un jugador desequilibrante en su selecci¨®n. Casi el 80 por ciento de los goles de Argentina le han tenido como intermediario o autor. La cifra explica la notable contribuci¨®n de un futbolista que no tiene sitio en el Valencia. No parece f¨¢cil explicar c¨®mo una selecci¨®n puede conquistar la Copa del Mundo con la decisiva intervenci¨®n de Ortega y a la vez verle en el banquillo o en la grada en cualquier partido de la Liga espa?ola. Habr¨ªa que preguntar a Passarella, que considera fundamental a Ortega desde sus tiempos en el River Plate, y a Claudio Ranieri, cuya italianizada idea del f¨²tbol no pasa por dar libertad a un media punta. Ortega puede hacer muchas cosas con el bal¨®n, pero muy pocas sin ¨¦l. Y en el f¨²tbol opresivo que pretende Ranieri no hay lugar para esta clase de jugadores.

El traspaso se anuncia inmediato. D¨®nde ir¨¢, no se sabe, pero en el Valencia ser¨¢ casi imposible que permanezca. Decisivo para Argentina, inservible para el Valencia. Misterios del f¨²tbol y sus gentes.