Croacia humilla a Alemania y cambia el curso del Mundial
El equipo de Suker alcanza las semifinales en un partido plet¨®rico
Croacia cambi¨® ayer el curso del Mundial. Hizo historia con may¨²sculas. Expuls¨® de Francia a Alemania, actual reina de Europa y tres veces del Mundo. El talento gan¨® esta vez a la miseria futbol¨ªstica germana del ¨²ltimo mes. No le sirvi¨® para llegar m¨¢s all¨¢. Alemania actu¨® toda la segunda parte con un hombre menos, pero Croacia, que debutaba como selecci¨®n en una Copa del Mundo, dio todo un recital de juego. Jarni, Vlaovic y un portentoso Suker firmaron los tres goles que env¨ªan a Alemania a casa.El equipo de Blazevic humill¨® a su rival con espectaculares contraataques. Fueron tres goles pero pudieron ser m¨¢s. El mi¨¦rcoles jugar¨¢n ante Francia la segunda semifinal. Una buena noticia para los anfitriones, deseosos de evitar el peligro alem¨¢n.
Alemania hab¨ªa flirteado con el v¨¦rtigo y ayer lo pag¨® muy caro. Sigue un esquema de lo m¨¢s simple: centros al ¨¢rea que buscan desesperadamente un remate o un cabezazo de Klinsmann o de Bierhoff. Y vuelta a empezar. Siempre con el mismo ritmo, con las mismas pulsaciones, como una pesada m¨¢quina que funciona por inercia, casi por simpat¨ªa. Hasta con una id¨¦ntica y aburrida eficacia: a dos goles por partido. Esa t¨¢ctica tan ramplona les hab¨ªa servido para empatar a Yugoslavia en el ¨²ltimo instante o para enviar a M¨¦xico a casa en los ¨²ltimos 15 minutos.
Ayer fue completamente insuficiente. Vogts defiende ese sistema y ayer no fue una excepci¨®n. Quiz¨¢s es que no tiene m¨¢s d¨®nde elegir: carece de un s¨®lido e imaginativo centro del campo y tiene que conformarse con los balones a la olla. Fue un calco de sus ¨²ltimos partidos. Centros desde las bandas y a esperar. Tarnat prob¨® tambi¨¦n sin fortuna dos disparos desde fuera del ¨¢rea.
Y Croacia supo por qu¨¦ los delanteros germanos hab¨ªan marcado tres goles en este Mundial. Salen como flechas, con una fuerza endemoniada en busca del bal¨®n.
Bierhoff, que no se distingui¨® ayer precisamente por su limpieza, estuvo a punto de marcar en dos ocasiones aisladas. Una tras un cl¨¢sico centro de Hamman y otra despu¨¦s de un remate que Ladic salv¨® despu¨¦s a pies de Klinsmann.
Nada m¨¢s. Alemania ah¨ª muri¨®. Deseosa de vengar su eliminaci¨®n en la ¨²ltima Eurocopa a manos de Alemania, Croacia se despoj¨® de cualquier complejo y empez¨® a adue?arse del centro de campo. No pod¨ªa ser de otra forma: se enfrentaban posiblemente la mejor y la peor l¨ªnea media del Mundial.
De forma paulatina, casi escalonada, Boban empez¨® a dirigir a su equipo, escoltado por Stanic y Jarni. Suker y Vlaovic quedaban en la delantera. Muy activo, el ariete del Madrid corri¨® y pele¨® como en sus grandes d¨ªas. El grupo de Blazevic empez¨® a demostrar que estaba en el partido. Fueron suyos los mejores regates, los mejores pases, el mejor f¨²tbol.
No demasiados, pero suficientes para sonrojar a los tres veces campeones del mundo y vigentes campeones de Europa.
Croacia pagaba su indolencia ante puerta hasta que Suker determin¨® el curso de la historia. Corr¨ªa el minuto 39 cuando recibi¨® un bal¨®n en la medular, sali¨® disparado y W?rns le derrib¨® tras una entrada sumamente violenta. Roja directa. Alemania se quedaba con 10 y quedaba a¨²n todo un mundo. Croacia empezaba a intuir el pasaporte a la semifinal. El mismo mensaje entendi¨® la hinchada, que enloqueci¨® con la expulsi¨®n.
Minutos despu¨¦s, ya en el descuento, lleg¨® el gol. Stanic dio una asistencia a Jarni -Vlaovic la dej¨® pasar- y marc¨® de chut cruzado batiendo a K?pke. S¨®lo faltaba por definir un interrogante: saber si Alemania ser¨ªa capaz de darle la vuelta al partido con un hombre menos. Casi lo consigue Bierhoff -su afici¨®n incluso cant¨® el gol- pero Jarni estaba all¨ª para ayudar en una duda de su portero. Y Tarnat recurri¨® sin ¨¦xito al disparo desde fuera del ¨¢rea. S¨®lo espejismos. Alemania se volc¨® alocadamente hacia el ¨¢rea de Ladic y Croacia esper¨®. Bien plantada en el campo, con unos jugadores tremendamente motivados, se dedic¨® a administrar su ventaja con impresionantes contraataques.
Alemania se qued¨® en pa?ales. Asanovic, el ex jugador del Valladolid, Boban y Vlaovic tuvieron el gol. K?pke estuvo providencial. El empate se iba alejando del marcador. Vogts intent¨® modificar el curso del partido con la inclusi¨®n de dos delanteros m¨¢s, Kirsten y Marschall, aunque sin fortuna.
La historia esta vez se escrib¨ªa al rev¨¦s. Vlaovic marcaba el segundo y Suker, en uno de las actuaciones m¨¢s prodigiosas que se le recuerdan, remachaba el tercero. El delirio croata en Ly¨®n.
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