Los disparates verbales de un portavoz

Es "incomprensible" que un cargo que requiere "especial sensibilidad" sea desempe?ado "de forma tan lamentable". As¨ª se expresaban el pasado martes dirigentes de CiU a prop¨®sito de la idoneidad o capacidad de Miguel ?ngel Rodr¨ªguez para ser el portavoz del Gobierno. M¨¢s en corto y por derecho, el secretario general del PSOE, Joaqu¨ªn Almunia, afirmaba ese mismo d¨ªa: "No tiene ni talla ni categor¨ªa para serlo"; de paso, eso s¨ª, aprovechaba para dar un puntillazo a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar: "Aunque quiz¨¢ el presidente se merece ese portavoz...".Sin duda alguna, Rodr¨ªguez ha demostrado una rara habilidad para echarse encima tanto a los nacionalistas catalanes -"es un problema para Aznar", reiteraron hasta la saciedad su portavoz, Joaquim Molins, y el l¨ªder de UDC, Josep Antoni Duran Lleida- como a los socialistas con sus desmesuradas e imprudentes manifestaciones.

En esa l¨ªnea, ha contribuido ¨²ltimamente, c¨®mo no, a crispar a¨²n m¨¢s las ya de por s¨ª crispadas relaciones entre el Ejecutivo y CiU sobre la ley del catal¨¢n y al aplazamiento de la reuni¨®n entre Aznar y Jordi Pujol. Incluso ironiz¨® respecto a ¨¦ste: "Le agradezco que me d¨¦ permiso para hablar; reparte carn¨¦s de catalanidad y ahora me da permiso para hablar".

El propio Pujol se limit¨® a calificar su visi¨®n como "ignorancia culpable", ya que CiU siempre ha sostenido que es catal¨¢n todo el que vive y trabaja en Catalu?a.

Otros compa?eros suyos, sin embargo, se extendieron en destacar que Rodr¨ªguez hab¨ªa vuelto a hacer gala "de sus mejores dotes diplom¨¢ticas" y que "todo empeora cuando toma la palabra". Sin duda, se acordaban tambi¨¦n de cuando en 1996 rechaz¨® una posible selecci¨®n futbol¨ªstica catalana en los t¨¦rminos siguientes: "?A qui¨¦n se le ha ocurrido esa sandez? Si tan preocupados est¨¢n por un deporte ingl¨¦s, que impidan a sus equipos contratar entrenadores y jugadores extranjeros (...) o que s¨®lo vayan a los estadios los de su ciudad, con lo que terminar¨¢n jugando a las canicas".

Con referencia a la tambi¨¦n postergada entrevista de Aznar con Almunia, Rodr¨ªguez ha pretendido ser incisivo al culpar de ello a Jos¨¦ Borrell, el vencedor en las elecciones primarias del PSOE para la candidatura a la presidencia del Gobierno: "S¨®lo tiene que venir [a La Moncloa] un interlocutor y no tienen claro qui¨¦n ha de ser". Los socialistas consideraron estas declaraciones como "provocadoras", no casuales y una simple excusa para retrasar la cita.

Adem¨¢s, llueve sobre mojado. Tras la de diciembre pasado, Rodr¨ªguez ya coment¨® con desprecio que Almunia s¨®lo hab¨ªa ido "a sacarse la foto". Por eso Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, portavoz socialista, le espet¨® entonces que "hiciera las maletas" y se fuese.

Sus estudios de filolog¨ªa hisp¨¢nica no le han servido de mucho, parece, a Rodr¨ªguez, cofrade mayor de la hermandad vallisoletana de las Siete Palabras. En efecto, su irreflexiva y, a menudo, desinformada incontinencia verbal le ha dejado en evidencia en demasiadas ocasiones, como cuando estim¨® "bueno y necesario" haber narcotizado a 103 inmigrantes ilegales para sacarlos del pa¨ªs en avi¨®n.

En una de las m¨¢s recientes, en abril pasado, no le qued¨® m¨¢s remedio que pedir perd¨®n. Lo anecd¨®tico o curioso es que lo hizo en catal¨¢n porque se encontraba en Barcelona. Para probar la veracidad de que el vicepresidente primero, Francisco ?lvarez Cascos, se hallaba en Asturias en una fecha en la que, seg¨²n el ex presidente del Ejecutivo socialista, Felipe Gonz¨¢lez, habr¨ªa mantenido contactos con Pedro J. Ram¨ªrez, el director del diario El Mundo, y Jorge Manrique, el abogado de los ex polic¨ªas Jos¨¦ Amedo y Michel Dom¨ªnguez, sobre los GAL y el secuestro de Segundo Marey no se le ocurri¨® sino hacer p¨²blica la identidad de los agentes que le escoltaban en ese viaje. "La responsabilidad es ¨²nicamente m¨ªa. No vi que sus nombres figuraban en la documentaci¨®n que se dio a los periodistas", reconoci¨®. La Uni¨®n Federal de Polic¨ªa le hab¨ªa denunciado por "revelaci¨®n de datos".

En otras oportunidades, en cambio, Rodr¨ªguez se mantuvo inflexible o improvis¨® ejercicios equilibristas para negar hasta lo evidente. Por ejemplo, en octubre de 1997, cuando sostuvo que era falso que en julio de ese a?o se hubiese aprobado en un Consejo de Ministros el padr¨®n municipal de 1996... pese a que as¨ª constaba en la referencia de los acuerdos tomados que su departamento redact¨® y entreg¨® a la prensa. Precisamente en mayo de 1997 ya hab¨ªa tenido que comparecer en el Congreso para tratar de rebatir las acusaciones de Antonio Asensio. El entonces presidente de Antena 3 denunci¨® que le hab¨ªa amenazado - "atente a las consecuencias"- si pactaba con el Grupo PRISA sobre la televisi¨®n digital. Su contraataque fue alegar que, a su vez, Asensio hab¨ªa querido coaccionarle con una campa?a de desprestigio y que, en el fondo, no era m¨¢s que "el actor de un gui¨®n escrito por Gonz¨¢lez".

La verdad es que Rodr¨ªguez no s¨®lo amenaz¨® a Asensio con ese "atente a las consecuencias" -matiz¨® haberlo dicho "en tono coloquial"-. Directivos y altos cargos de la cadena, como Manuel Campo Vidal, Javier Gimeno, Jos¨¦ Oneto o Jes¨²s Hermida, confirmaron por escrito tales amenazas telef¨®nicas, de las que fue testigo Miquel Roca, ex portavoz de CiU. En concreto, a Oneto le dijo: "Est¨¢s trabajando con un g¨¢nster y un mafioso [por Asensio]", "Asensio no sabe lo que ha hecho firmando con [Jes¨²s de] Polanco y le va a costar muy caro", "no voy a parar hasta que acabe en la c¨¢rcel", "te avisar¨¦ un minuto antes de que esto suceda", "no le van a servir de nada sus guardaespaldas porque el Gobierno tiene muchos m¨¢s"...

El PSOE lleg¨® a comparar a Rodr¨ªguez con el nazi Goebbels o el senador estadounidense McCarthy, que desat¨® una caza de brujas contra los comunistas, al "intoxicar de modo deliberado" a la opini¨®n p¨²blica. "Hablar de libertad de expresi¨®n chirr¨ªa viniendo de usted", le resumi¨® una ma?ana la senadora Ana Arn¨¢iz. Como mujer, seguramente ella tambi¨¦n se habr¨ªa escandalizado cuando en 1996, en el 18? aniversario de la Constituci¨®n, Rodr¨ªguez se exhibi¨® tan clasista y sexista como para apostillar: "Si fuera ni?a, se vestir¨ªa de largo; si fuera ciudadano, votar¨ªa".