Tres hombres del cine espa?ol buscan ficciones que transformen la vida real

La Polic¨ªa de EE UU ha empezado a actuar como han visto que lo hacen sus colegas de la pantalla. Hablan y se mueven como ellos. El director Montxo Almend¨¢riz cont¨® ayer esta an¨¦cdota en un debate en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo, junto a otros dos cineastas relevantes, Alejandro Amen¨¢bar y Agust¨ªn D¨ªaz Yanes, que hablaron del tremendo impacto que el cine produce en la realidad. "Lo que un filme quiere reflejar de la realidad y lo que ¨¦sta chupa de las pel¨ªculas es una interacci¨®n muy presente ya en la vida real", se?al¨® Armend¨¢riz.

"Si los pu?etazos y los tiros en el cine no fueran tan completamente irreales no nos los creer¨ªamos", se?al¨® Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n, y cont¨®: "Hace poco asaltaron la gasolinera que hay al lado de mi casa y pegaron unos tiros, aunque no pas¨® nada. Y a m¨ª me pareci¨® que aquello no era real, porque los tiros reales sonaban muy mal". Incluso cosas tan sensoriales, como los ruidos del cine, nos han cambiado la vida, opina el cineasta, que dirige un curso sobre La realidad y la mirada en el cine actual, junto al catedr¨¢tico Enrique Tor¨¢n.Guti¨¦rrez Arag¨®n considera que antes los directores se acercaban m¨¢s directamente a la realidad "porque las pel¨ªculas se hac¨ªan pensando directamente en las cosas que se le¨ªan. Pero ahora est¨¢ apareciendo una mirada m¨¢s oblicua en el cine y la realidad cinematogr¨¢fica para los espectadores ya no es la Gran V¨ªa madrile?a, sino las calles de Manhattan, lo que hace entrar en las pantallas un tipo de realidad mucho m¨¢s obl¨ªcua, menos veraz y directa".

Piensa Alejandro Amen¨¢bar que en las pel¨ªculas siempre hay una mezcla de realidad cinematogr¨¢fica y realidad vivida: "Cuando me preguntan en qu¨¦ baso mis historias digo que en lo que he vivido, en lo que he visto y en las pel¨ªculas, sobre todo cuando te pones a hacer homenajes, como he hecho en mi ¨²ltima pel¨ªcula". El director de Tesis y Abre los ojos cree que lo que importa es conocer la realidad de la que se va a hablar en una pel¨ªcula: "Al preparar Abre los ojos ten¨ªamos que mostrar un psiqui¨¢trico penitenciario y quise saber c¨®mo era uno de ellos, porque estamos acostumbrados a ver los manicomios t¨ªpicos de las pel¨ªculas de Hollywood, con paredes acolchadas y todo eso. Me llev¨¦ un chasco, porque v¨ª que coincid¨ªa con los de esas pel¨ªculas. Pero lo importante es que lo que vas a filmar lo has visto realmente, porque esto te hace sentirte con fuerza moral para contarlo".

Agust¨ªn D¨ªaz Yanes, director de Nadie hablar¨¢ de nosotras cuando hayamos muerto, pel¨ªcula ganadora de nueve Goyas, cree que "es imposible hacer ya una pel¨ªcula sin el peso de las que a uno le gustan. Los planos de la pel¨ªcula me vienen de otras que me han dejado huella en la memoria", dijo. "El cine ha llegado a un nivel de sofisticaci¨®n y de capacidad de mentira tal, que est¨¢ lleno de cosas que no tienen nada que ver con la realidad. Nosotros, en mi pel¨ªcula, hicimos los tiros con todo tipo de instrumentos que no tienen nada que ver con lo que es un tiro real, y eso nos pesa mucho a los que provenimos del cine norteamericano y tenemos una serie de hipotecas originadas por nuestra adicci¨®n a ¨¦l. Por ejemplo, cuando vas a poner una comisar¨ªa espa?ola en una pel¨ªcula, te aterrorizas, porque piensas que no se va creer nadie all¨ª una bandera espa?ola y un retrato del Rey, y dan ganas de quitarlo, pero luego lo dejas porque las comisar¨ªas son as¨ª". Y a?ade que uno de los defectos del cine norteamericano de ahora "es que todo es ya inveros¨ªmil. Hay tiros durante 45 minutos y no muere nadie, o mueren todos, menos el que tiene que morir".

D¨ªaz Yanes est¨¢ a punto de firmar su pr¨®xima pel¨ªcula, una historia futurista que se desarrolla en el a?o 2115, titulada Madrid Sur, para la que requiere un elevado presupuesto. El director piensa que los presupuestos en el cine espa?ol "son demasiado ajustados y te ponen casi al l¨ªmite de no poder hacer lo que quieres. Normalmente, se cuenta con un 20% menos de dinero de los necesario, y esto crea problemas, sobre todo de tiempo de rodaje. Los presupuestos en Espa?a deber¨ªan subir al menos en un 50%. Para poder hacerla de manera que funcione, una pel¨ªcula media deber¨ªa contar con unos 400 millones, con independencia de la complejidad de la historia que cuente". Y dice el cineasta que otro problema con el que se enfrenta el cine espa?ol es que se le considera europeo y se espera de ¨¦l que tenga el acabado del cine de otros pa¨ªses de Europa, cosa que pocas veces es aqu¨ª factible.