"Toda esta pesadilla se reduce, al final, a una cuesti¨®n de dinero"
NANI FLORES ESPOSA DEL PATR?N DEL "BRIZZ III" Nani Flores, de 32 a?os, se ha lanzado a una actividad fren¨¦tica para conseguir la repatriaci¨®n desde Gambia de Antonio Lozano, patr¨®n del Brizz III, al que no ve desde el pasado 1 de diciembre, cuando se hizo a la mar y no volvi¨®. Pregunta. ?De d¨®nde ha sacado usted tanta energ¨ªa para la lucha? Respuesta. De mi marido, para traerlo de donde est¨¢. Eso es suficiente. La imagen de mi marido se me pone delante y me da fuerzas. P. ?Cree usted que finalmente conseguir¨¢n que no se celebre el juicio en Gambia, el pr¨®ximo lunes, que ustedes dan por perdido? R. El tiempo es oro. Tendremos que buscar el dinero por donde sea. Pido a los bancos y a las instituciones que nos ayuden. Al final, es cuesti¨®n de dinero, resulta muy duro pero toda esta pesadilla se reduce al dinero, y hacen falta los millones para que vuelvan a casa estas dos personas. P. ?En qu¨¦ medida cambiar¨¢ su vida a partir de ahora? R. Quiero creer que Antonio volver¨¢. Voy a hacer todo lo posible porque regrese. Esto es algo grave que est¨¢ pasando en nuestras vidas y repercutir¨¢ en el futuro. No ser¨¢ una cosa que olvidemos pronto. Son circunstancias que siempre les pasan a los dem¨¢s. Pero ahora me ha ocurrido a m¨ª. Siempre hay injusticias, gente que est¨¢ injustificadamente en la c¨¢rcel por delitos que no ha cometido. Pero ahora incumbe a mi marido. Al principio sent¨ªa sorpresa, luego, esperanza en una resoluci¨®n r¨¢pida, y ahora, ya, la locura. P. ?Aconsejar¨¢ a su marido que no vuelva a embarcarse? R. No lo s¨¦, cuando regrese, ¨¦l tendr¨¢ que decidir qu¨¦ hace. Es una persona que en cuesti¨®n de trabajo no le gusta que nadie le diga lo que tiene que hacer. Es marinero desde siempre, desde que tuvo edad de hacerse a la mar. Ese es su oficio y yo lo respeto. P. Ustedes est¨¢n acostumbrados a las largas separaciones... R. A eso no se acostumbra una nunca, pero se acepta y se trata de llevar lo mejor que se puede. Esperas que pasen los meses. Y aguardas a que llegue la hora de hablar por radio, que es lo que hacemos, hablar diariamente a trav¨¦s de la emisora. Es muy duro, y si te surgen pesadillas como ¨¦sta, te desbordan. P. ?Cree que los pol¨ªticos deber¨ªan estar jugando un papel m¨¢s decisivo para la repatriaci¨®n de los dos marineros? R. Yo no milito en ning¨²n partido, pero tengo ideas propias. Siempre confi¨¦ en que el Gobierno central iba a arreglar este problema con rapidez. Pero nos hemos encontrado con que est¨¢ costando mucho esfuerzo. Las personas directamente afectadas nos vemos obligadas a permanecer al pie del ca?¨®n d¨ªa y noche. No solucionaron nada cuando nos limit¨¢bamos a enviar fax. Esa es mi decepci¨®n con los pol¨ªticos. El Gobierno central tiene que dar soluciones r¨¢pidas: es su obligaci¨®n.
"Hay veces que no sabes c¨®mo vas a superar otro d¨ªa"
CINTA REQUENA ESPOSA DEL JEFE DE M?QUINAS DEL PESQUERO,Cinta Requena, esposa de Domingo L¨®pez, el jefe de m¨¢quinas del Brizz III, acaba de cumplir 34 a?os, es ama de casa y tiene una pena honda clavada en sus ojos azules. Habla muy poco y rompe a llorar cuando recuerda el d¨ªa que embarc¨® su marido: el 20 de marzo. Ahora trata de transmitir diariamente a Domingo L¨®pez, en las conversaciones telef¨®nicas que mantienen, mensajes de esperanza, porque lo encuentra an¨ªmicamente roto. Ayer, Cinta se permiti¨® un detalle trivial: le dijo que el Atl¨¦tico de Madrid, el equipo de toda la vida de Domingo, hab¨ªa ganado 3-0 al Laszio. Pregunta. ?Cree usted que se pueden conseguir antes del lunes, d¨ªa de la celebraci¨®n del juicio, los 38 millones de pesetas que exigen las autoridades de Gambia para dejar en libertad sin cargos a los dos marineros retenidos? Respuesta. Esa es mi esperanza. Espero que los bancos ayuden a la empresa armadora, que asegura que no tiene tanto dinero. Tambi¨¦n conf¨ªo en que la Junta de Andaluc¨ªa o el Ministerio de Asuntos Exteriores avalen a la compa?¨ªa en caso de necesidad. No queremos pensar en que finalmente se haga el juicio, porque lo perderemos. All¨ª no hay justicia. Prima el dinero. A esos dos hombres les caer¨ªan entre dos y 10 a?os de c¨¢rcel. P. ?Qu¨¦ le cuenta su marido? R. Lo encuentro cada d¨ªa m¨¢s desanimado. An¨ªmicamente est¨¢ mal, sin saber qu¨¦ va a pasar con ellos, lleno de incertidumbres. Ha puesto toda la esperanza en nosotros. No se sostiene de tantos nervios. Y yo intento darle ¨¢nimos. P. Ustedes tienen dos hijos, de nueve y tres a?os de edad. ?Est¨¢n los cr¨ªos preocupados por la situaci¨®n de su padre? R. Naturalmente, el mayor me pregunta a cada momento que cu¨¢ndo llegar¨¢ su padre, que por qu¨¦ tarda tanto en regresar de la mar. Se ha dado cuenta, porque escucha, est¨¢ al tanto. Yo trato de no preocuparlo, que siga con su vida. P. ?Se siente mucha soledad en su situaci¨®n? R. S¨ª, soledad e impotencia. Hay veces que no sabes c¨®mo vas a llegar al otro d¨ªa. Te sientes desgarrada, y desamparada tambi¨¦n. P. ?C¨®mo valora el comportamiento de sus vecinos de Isla Cristina y de los ciudadanos andaluces en general ante este problema? R. He visto una buena respuesta. La gente de Isla Cristina se ha volcado con nosotros divinamente. No tenemos ninguna queja. P. Ustedes han recurrido reiteradamente a la mediaci¨®n en el conflicto del Ministerio de Asuntos Exteriores. ?Qu¨¦ respuesta han tenido? R. S¨¦ que est¨¢n trabajando para que mi marido y su compa?ero de trabajo vuelvan lo antes posible. Pero yo les pido que se impliquen m¨¢s, que hagan todo lo que est¨¦ en sus manos. En Gambia hay dos vidas que es necesario traer aqu¨ª inmediatamente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Relaciones auton¨®micas
- Espa?oles extranjero
- Conflictos diplom¨¢ticos
- Apresamiento pesqueros
- Acuicultura
- Gambia
- Comunidades aut¨®nomas
- Pol¨ªtica exterior
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Secuestros
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Andaluc¨ªa
- Pesca
- Relaciones internacionales
- Espa?a
- Relaciones exteriores
- Delitos
- Migraci¨®n
- Agroalimentaci¨®n
- Administraci¨®n p¨²blica
- Pol¨ªtica
- Demograf¨ªa
- Justicia
- Sociedad