Rev¨®lver se despide en La Riviera del p¨²blico espa?ol

Para Carlos Go?i, l¨ªder indiscutible de Rev¨®lver, los EEUU de Am¨¦rica siguen siendo la tierra prometida. Su forma de vida, sus carreteras interminables, sus enormes coches, sus rubias exuberantes y, sobre todo, su blues y su energ¨¦tico rock and roll. La m¨²sica de Carlos Go?i, al menos, ha abundado siempre en esas referencias y est¨¦tica: historias de perdedores, de cadillacs llamativos, gasolineras en mitad del desierto y vagabundos que suben y bajan de largos trenes. La leyenda de la Am¨¦rica profunda. El t¨®pico.Por todo ello no es de extra?ar que Espa?a se le haya quedado peque?a y decida ahora dar el gran salto para irse a vivir una temporada larga a ese pa¨ªs que le fascina. All¨ª viven la mayor¨ªa de sus ¨ªdolos a los que pretende emular, Springsteen o Dylan principalmente, y all¨ª est¨¢ la meca de todo lo que ¨¦l quiere empaparse.

De momento, ha pensado quedarse all¨ª durante un a?o. Su concierto de esta noche en La Riviera es su despedida de los escenarios espa?oles por un largo tiempo. Lo que est¨¢ muy claro es que, pese a esa fascinaci¨®n por lo yanqui, a Go?i no se le puede negar una capacidad inmensa para conectar con el gran p¨²blico. Rev¨®lver -un grupo que es s¨®lo ¨¦l y unos m¨²sicos a su servicio- lleva a?os abarrotando escenarios y vendiendo toneladas de discos. Ah¨ª est¨¢n los ¨¦xitos de Calle Mayor, su ¨²ltimo disco de estudio, y B¨¢sico 2, su ¨²ltimo de directo.

Sin embargo, nunca la cr¨ªtica ha sido demasiado ben¨¦vola con Carlos Go?i. Esa identificaci¨®n con Bruce Springsteen, su demagogia y su actitud victimista pesan m¨¢s que su enorme talento para construir canciones sencillas que enganchan con un p¨²blico no muy exigente que pasa de comerse el coco. Go?i, por su parte, nunca ha pretendido otra cosa que gustar. Es por ese camino por el que ha logrado la fama de honesto que acarrea.