V¨ªctima de las obras

Quiero felicitar a Javier Mar¨ªas por su art¨ªculo Tortura y asedio, publicado el pasado 6 de septiembre en su peri¨®dico, acerca de la nefasta gesti¨®n del se?or ?lvarez del Manzano como alcalde de Madrid, con cuyo contenido estoy totalmente de acuerdo.Quiz¨¢ el tono del mismo pueda parecer alarmista o exagerado para quien no viva en esta ciudad; o viviendo en ella sea contratista de obras, gremio beneficiario por antonomasia de la obsesi¨®n excavatoria del se?or Manzano. Como habitante de Madrid, soy v¨ªctima por tanto del crepitar de los martillos neum¨¢ticos tras cada esquina, de los andamios por doquier, de los coches aparcados sobre las aceras, del abandono de los parques, de los ciclomotores ensordeciendo a escape libre y salt¨¢ndose sem¨¢foros sin que la polic¨ªa, muy ocupada en hostigar a los vendedores callejeros, nada haga (por citar un m¨ªnimo porcentaje de los atentados a la salud, la libertad y el buen gusto que diariamente se perpetran); puedo dar fe de que, si de algo peca Javier Mar¨ªas en su art¨ªculo es de prudencia y moderaci¨®n.

Y, por supuesto, de la brillantez a la que nos tiene acostumbrados. Una brillantez que no debe hacernos olvidar, sin embargo, el hecho triste de que tenga que ser alguien ajeno a la clase pol¨ªtica quien denuncie estos desmanes, mientras que la oposici¨®n (?se han opuesto a algo en estos ¨²ltimos a?os?), lejos de catalizar lo que ya es un clamor generalizado, duerme el sue?o de los justos.- .