Vive r¨¢pido y muere joven

Apenas acababa Ben Johnson de salir de Se¨²l, cuando su colega femenina, FloJo, ridiculizaba un poco m¨¢s el deporte. La temprana muerte de la extraordinaria corredora Florence Griffith-Joyner, casi diez a?os despu¨¦s del d¨ªa en que gan¨® el primero de sus tres oros ol¨ªmpicos de Se¨²l, ha hecho renacer todos los viejos rumores de que su ¨¦xito estaba basado en las drogas para mejorar el rendimiento.Desde luego, su muerte a los 38 a?os ha hecho resurgir el fantasma ( tan preocupante para otros muchos atletas que han hecho lo mismo) de que tambi¨¦n ¨¦sta se debe a las drogas. Era ir¨®nico que el mismo d¨ªa de su muerte, el hombre con el que se la relacionar¨¢ a perpetuidad en los anales de la velocidad, Ben Johnson, se present¨® ante un tribunal de Toronto tratando de conseguir que se anule su exclusi¨®n por consumo de drogas. No lo logr¨®, y seguir¨¢ siendo, en mayor medida a¨²n que todo el sistema estatal de dopaje de la RDA y los vilipendiados atletas chinos, el chivo expiatorio para el consumo de drogas en los deportes ol¨ªmpicos, especialmente en el atletismo. La ¨²nica diferencia en opini¨®n de mucha gente, incluyendo la m¨ªa, es que a Johnson le pillaron.

Yo conoc¨ª por primera vez a Griffith-Joyner en 1985, cuando ya era medalla de plata ol¨ªmpica en Los Angeles 84, aunque estaba lejos de ser tan r¨¢pida como las atletas de la talla de su colega Evelyn Ashford y un abanico de corredoras de la RDA. En aquella ¨¦poca, era una de las mujeres m¨¢s hermosas que yo he visto nunca, menuda, de cara ovalada y un cutis impecable. Pasaron tres a?os antes de que volviera a estar tan cerca de ella. Fue en Se¨²l en 1988, y hab¨ªa sufrido una metamorfosis. Aparte del aumento muscular general y la disminuci¨®n de los pechos, su mand¨ªbula se hab¨ªa alargado, un fen¨®meno llamado acromegalia, que se reconoce como efecto de la hormona del crecimiento humano.Llevaba una gruesa capa de maquillaje para ocultar un acn¨¦ general, un efecto secundario de las hormonas masculinas y su voz se hab¨ªa vuelto considerablemente m¨¢s ronca.

Durante una conferencia de prensa en Tokio, despu¨¦s de Se¨²l, la destronada campeona ol¨ªmpica de los 100 metros Evelyn Ashford, se dirigi¨® muy enfadada a nosotros despu¨¦s de que FloJo volviera a contar por en¨¦sima vez que deb¨ªa su mejora de forma a las "cinco mil abdominales al d¨ªa". "?Por qu¨¦ no escrib¨ªs lo que est¨¢ pasando de verdad?" nos pregunt¨® Ashford, que quiz¨¢s no conoc¨ªa muy bien los complicados procedimientos a que nos someten las leyes en caso de difamaci¨®n. Bueno, Evelyn, con el debido respeto a los muertos, ahora lo hemos contado.

?The Independent