El ritmo del poeta y la ira del agitador
"Una cosa que me parece horrible es que ahora compras un disco de los Animals, de estas reediciones que hacen en compacto, y no hay letras. Eso es un robo...". Estas palabras de Bernardo Atxaga certifican que hay gente que considera las letras de las canciones algo m¨¢s que un simple relleno de una melod¨ªa m¨¢s o menos acertada. Y es de agradecer, ya que detr¨¢s de cada texto suele haber una ardua tarea. Las musas pueden echar una mano, pero sin un m¨ªnimo esfuerzo ni siquiera las cast¨¢lidas prestan servicio. Flotando en un mar de letras donde cabe la prosa y el verso, en Euskadi uno encuentra letristas excelsos y meros juntaletras sin apenas talento. En cuanto al idioma, independientemente de la lucidez y salvo contadas excepciones, el mercado se lo reparten formaciones que cantan en euskera, castellano o ingl¨¦s. Como ratifica Juan Carlos Rodr¨ªguez, miembro de la T¨¦trada Literaria de Llodio y compositor del grupo The Drellas, el empleo de la lengua de Shakespeare suele obedecer al camuflaje de frases poco elaboradas. "El ingl¨¦s sirve un poco de excusa para no tener que trabajarte tanto las letras, mientras que el castellano te exige m¨¢s en ese sentido. Tienes que cuidar un poquit¨ªn m¨¢s todo lo que quieres contar y elegir las palabras para que suenen mejor. En Euskadi, en general, si tiendes a lo del rock radical, los temas y las formas de hacer las canciones son manidas, muy recurrentes. Sin embargo, las de otros grupos suelen ser m¨¢s personales". Diferencias idiom¨¢ticas El concepto de algo personal incluye cualidades como el car¨¢cter propio, distintivo y peculiar. As¨ª, en el manejo de los diferentes idiomas se puede descubrir una serie de vicios que no tienen por qu¨¦ determinar la descalificaci¨®n de una propuesta. "De la misma manera que me puede parecer una letra buen¨ªsima diciendo: "Vente pa keli que tengo un buga esperando", lo mismo me parece que el euskera hoy tiene que estar contaminado porque hay muchos euskaldunberris o porque hay muchos dialectos. En ese sentido no soy nada purista, creo que tanto el euskera como el castellano son lo que la gente hace que sean", sostiene Roberto Moso, autor de las canciones de Zarama, presentador televisivo y locutor radiof¨®nico. Las palabras de Benito Lertxundi no hacen sino ratificar que la calidad no es patrimonio exclusivo del perfeccionismo y la extrema pulcritud. "Muchas veces, estil¨ªsticamente, se puede utilizar intencionadamente un lenguaje mucho m¨¢s directo para hacer una cosa m¨¢s de calle o estar un poco m¨¢s cerca de ese ¨¢mbito. En ese sentido, si el prop¨®sito se consigue, creo que tambi¨¦n hay que considerarlo como un acierto", apunta el veterano cantautor guipuzcoano. A la hora de encasillar, la calle dicta su propia sentencia:cantar en ingl¨¦s es m¨¢s aut¨¦ntico, hacerlo en euskera permite acceder con m¨¢s facilidad a subvenciones y discogr¨¢ficas aut¨®ctonas y utilizar el castellano supone un punto adicional en el hipot¨¦tico medidor de potencial comercial. Sin ir m¨¢s lejos, el compositor vasco que m¨¢s dinero ingresa en concepto de derechos de autor es Mikel Erentxun, cantante ligado al castellano (igual que Mocedades o El Consorcio, otros superventas) desde sus inicios con Duncan Dhu. El ¨¦xito del compositor donostiarra representa el triunfo de la proverbial despreocupaci¨®n del pop frente a la publicitada corriente sociopol¨ªtica que a¨²n hoy se destaca en muchos ¨¢mbitos como principal representaci¨®n de la m¨²sica facturada en Euskadi. El principal estandarte de esta veterana y combativa vertiente es Ferm¨ªn Muguruza, emisario de consignas agitadoras que ve en la m¨²sica un instrumento pol¨ªtico v¨¢lido, pero tras ¨¦l se sit¨²an muchos grupos que apuestan por la subversi¨®n, el independentismo y por destapar las miserias del sistema. Entre ellos, aparecen nombres como Su Ta Gar, EH Sukarra, Latzen, Hemendik At!, Skunk y Ekon. Otras formaciones (Anestesia, Flitter, Koma, Soziedad Alkoh¨®lika) critican al sistema sin que el conflicto pol¨ªtico se ponga una y otra vez sobre la mesa. Puede ser un s¨ªntoma m¨¢s, aunque m¨ªnimo, de la evoluci¨®n que ha sufrido el contenido de las letras; olvidada la ¨¦poca de la canci¨®n protesta y superado el rock radikal vasco, la apertura es innegable. Atendiendo a los vaticinios de Ruper Ordorika, ese proceso de diversificaci¨®n puede verse de nuevo intensificado si llega a consolidarse la tregua de ETA. "La situaci¨®n actual me da que pensar. Lo mismo que los cantautores tuvieron dificultades para evolucionar despu¨¦s de la muerte de Franco, porque de repente se pod¨ªan decir cosas y determinados lenguajes dejaban de ser interesantes, supongo que ahora algunos aspectos del rock vasco tendr¨¢n que variar", afirma. En ese sentido, quienes tendr¨¢n menos dificultades para actualizar su repertorio ser¨¢n los grupos menos comprometidos. Hay quien recurre al cancionero vasco o a la obra de diversos literatos. Como fruto de cosecha propia y en pr¨¦stamo, en ambas formas se presenta el regusto po¨¦tico que emana la producci¨®n de muchos artistas. Por lo dem¨¢s, la realidad, seg¨²n el prisma de cada cual, es la principal fuente de inspiraci¨®n de la mayor¨ªa de los autores vascos; tanto de los puramente chistosos como de los desgarrados narradores de lo cotidiano.
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