Mar¨ªa Teresa va en serio
Tras una larga carrera period¨ªstica, Mar¨ªa Teresa Campos se convirti¨® en un rostro popular de la televisi¨®n gracias a una serie de programas desenfadados, cuando no simplemente fr¨ªvolos. De ah¨ª el inter¨¦s despertado por su participaci¨®n en Cruce de caminos, donde los directivos de Tele 5 la juntaron con Mar¨ªa Antonia Iglesias y Ram¨®n Colom, cultivadores de un tipo de periodismo que, por lo menos en teor¨ªa, est¨¢ a a?os luz del practicado por la se?ora Campos. Muchos tem¨ªan eso que los anglohablantes llaman miscasting, y m¨¢s de uno ten¨ªa la impresi¨®n de que poner a Mar¨ªa Teresa Campos a presentar un programa serio era como darle a Lina Morgan el papel de Lady Macbeth. Pues bueno, a tenor de lo visto la noche del estreno (el s¨¢bado, a las 21.00), Mar¨ªa Teresa Campos ha demostrado ser una actriz de variados registros. Es m¨¢s, quien nunca hubiera visto sus programas frivolones la considerar¨ªa, sin problemas, una excelente profesional que sabe enfrentarse a los temas m¨¢s dif¨ªciles (en este caso, la tregua de ETA o la inconcebible liberaci¨®n del violador del Ensanche) de manera eficaz y humana. Despu¨¦s de ver Cruce de caminos, no ser¨¦ yo quien ponga el grito en el cielo si a Lina Morgan le dan el papel de Lady Macbeth.
Cruce de caminos es, de hecho, una versi¨®n corregida y aumentada de Informe semanal. La diferencia est¨¢ en que aqu¨ª no se suelta el reportaje sin m¨¢s, sino que se intenta envolverlo cruzando g¨¦neros. El tema se expone; se debate en una mesa con algunos invitados (que esperemos mejoren en las pr¨®ximas ediciones, por cierto); se traslada al p¨²blico presente en el plat¨®; se lanza al espectador para que aquel a quien le apetezca decir algo al respecto pueda hacerlo por tel¨¦fono.
?Se alargan demasiado las discusiones? Esa impresi¨®n qued¨® la noche del estreno. Los contertulios del tema vasco divagaban en exceso y abundaban en las obviedades (se ech¨® de menos a gente como Fernando Savater, Jon Juaristi o Patxo Unzueta), mientras que el asunto de Ma¨ªllo fue perdiendo intensidad despu¨¦s del mon¨®logo inicial a cargo del periodista Joaquim Rogl¨¢n, que pon¨ªa los pelos de punta.
Nada que objetar al homenaje a Paco Rabal, pero s¨ª a la duraci¨®n excesiva del programa: se han de decir cosas muy interesantes para mantener al espectador enganchado a la pantalla durante dos horas. De todas maneras, Cruce de caminos merece un margen de confianza y una felicitaci¨®n a Mar¨ªa Teresa Campos, que ha sabido pasar h¨¢bilmente de reina del marujeo a cronista de una actualidad que no es precisamente de color rosa.
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